Piedad Nazarena

Riánsares López Cortés
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La Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno presenta el boceto del nuevo paso de 'La Borriquilla', el segundo para la cofradía taranconera de Manuel Madroñal Isorna

La Festividad de la Virgen de la Piedad, que desde hace tres años celebra la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno, se ha convertido esta edición en un acto especial más de devoción en la recta final del trescientos aniversario de la cofradía taranconera. La lluvia, aunque débil persistente, impidió la salida a la calle de la nueva Piedad, obra del artista Manuel Madroñal Isorna; que se estrenó en la procesión del Viernes Santo de la última Semana Santa,  aunque aquel cortejo tuvo que suspenderse al poco de iniciarse también por las inclemencias del tiempo. Portada por alrededor de cuarenta banceros, con la banda de cornetas y tambores Jesús Nazareno tocando, desde el altar situado en la Puerta del Sol la imagen se trasladó hasta la nave central de la iglesia parroquial de la Asunción. El templo se dejó en penumbra y los fieles llevaban velas. Antes de finalizar el acto, como ya ocurriera en 2016 con el cofrade nazareno Ángel Muñoz, por parte del presidente, Rafael Luján Chumillas, se nombró como nuevo capaz a Javier Martínez Santaolalla.  La eucaristía posterior, dedicada especialmente a los difuntos de la hermandad, y una cena de convivencia con la asistencia de más de 140 personas, pusieron el broche final a la festividad de la Virgen de la Piedad. Una cita que comenzó, en la propia iglesia, con la presentación de los bocetos de la nueva imagen de la Entrada de Jesús en Jerusalén, conocida como La Borriquilla, que estrenará la hermandad en la Semana Santa de 2019. 

Presentación. El escultor, Manuel Madroñal Isorna no pudo asistir pero sí sus padres, Antonia y Manuel, que recibieron una placa y la medalla de la hermandad, también el alcalde, José Manuel López Carrizo, y la diputada nacional y portavoz del Grupo Municipal Popular, María Jesús Bonilla. Todos los asistentes pudieron conocer al detalle cómo será la nueva Borriquilla, ya que el autor envió con sus progenitores un boceto a pequeña escala del conjunto escultórico completo y una réplica de la cabeza de Jesús. «Va a servir para seguir engrandeciendo nuestro patrimonio y el de la Semana Santa de Tarancón», apuntó Chumillas, que quiso poner en valor los otros proyectos en los que está inmerso Madroñal Isorna de cara a la Cuaresma de 2019, uno para Almería y otro para Servilla capital.

«La Hermandad del Nazareno quiere un diseño único tan excelente como La Piedad y hemos confiado de nuevo en Manuel», concretó el presidente, que recordó que la nueva imagen será de talla completa en madera de cedro policromada al óleo, mientras que la actual, de 1982, fue realizada en pasta de papel en los Talleres de Arte Cristiano Olot (Gerona). Para representar este momento de júbilo, de Jesús sobre un pollino entrando a Jerusalén, el imaginero está utilizando técnicas tradicionales. «Fieles a nuestro estilo clásico, sobrio y sencillo, y a los matices de la zona, está previsto que llegue la próxima Cuaresma», señalan desde el Nazareno, que todo el mes de noviembre mantiene el altar con La Piedad dedicado a los difuntos. recta final. Para acabar de celebrar el 300 aniversario, este sábado, a las ocho y media de la tarde en el Convento de los Padres Franciscanos, Valentín Luna de la Ossa imparte la conferencia Camino al Calvario: El rostro que en silencio nos habla, con el acompañamiento musical de Casimiro Mejía Montalvo. El acto de clausura, con la presencia del obispo de Cuenca, José María Yangüas, que oficiará la misa de acción de gracias, será el 1 de diciembre. La eucaristía estará cantada por el grupo local Coral Malena. Además, está prevista una proyección fotográfica resumen de este tricentenario nazareno, la entrega de recuerdos y la actuación de la banda de Jesús Nazareno.