Ávila se presenta a la reelección a la Alcaldía y abre el proceso de las primarias

Antonio Gómez
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Ávila se presenta a la reelección a la Alcaldía y abre el proceso de las primarias - Foto: PSOE

 
El alcalde y secretario general de la Agrupación Local del PSOE de Cuenca, Juan Ávila, confirmó su intención de presentarse de nuevo como candidato a la Alcaldía y propuso la celebración de unas primarias  para que «sean los militantes quienes decidan quién es la persona» que esté al frente de la lista a las municipales. 
Una decisión que «no me costó mucho, aunque será un sacrificio para mi familia, pero lo hemos hablado para que continuase adelante». Hizo hincapié en que su propuesta de planteamiento de primarias «es sincera» y se abrirá el proceso por si hay alguien más que quiere presentarse también, pero serán los «204 hombres y mujeres que militan en la Agrupación Local los que decidan». 
El reglamento federal de primarias del Partido Socialista refleja que en este tipo de procesos deberá ser solicitado  hasta el 30 de octubre por más del 50% de la militancia del ámbito municipal, es decir, «103 firmas». El calendario marca que el candidato o candidatos deberán presentar los avales entre el 3 y 17 de noviembre, y en caso de que hubiese más de uno serán los militantes los que elegirán con los votos el próximo día 30 de noviembre.  
El citado reglamento permite a los alcaldes renovar como candidatos salvo que un número de militantes pida unas elecciones primarias, y agregó que es importante que se celebren «porque soy partidario de ellas». 
Ávila subrayó que entre los motivos que le llevó a tomar esta decisión de aspirar de nuevo a la Alcaldía está  «mi compromiso con los hombres y mujeres de esta ciudad, donde nací hace casi 48 años, y a la que volví tras estar un tiempo en Madrid». 
 
votantes. Tampoco había que olvidarse «mi compromiso  de quienes me votaron como con quienes no, con quienes piensan como yo y con quienes piensan diferente, y mi compromiso con mi partido, al que me afilié a los 19 años». 
Durante estos tres años de legislatura se hicieron las cosas bien y, por eso, «no estamos dispuestos a que vuelva el despilfarro de la legislatura pasada, ni los chanchullos que hubo porque no puede volver el sectarismo, los intereses particulares y la arrogancia».
El primer edil apuntó que durante estos años se gobierna «desde el respeto a todo el mundo y desde la humildad, pero sobre todo con honradez, «aunque las circunstancias son más difíciles que nunca». 
Desde un primer momento tuvo claro que si no hubiera tenido el apoyo explícito de «Sánchez, García-Page y Martínez Guijarro, ni me plantearía el volver a presentarme, pero también es importante el apoyo de los militantes de la Agrupación Local, y eso me congratula». La próxima legislatura la contempla con optimismo, ya que tiene claro que Cuenca va a tener «una oportunidad de oro para recuperar el atraso al que hemos sido condenados durante algo más de tres años por el Gobierno regional y su presidenta».
Está convencido que Emiliano García-Page será presidente de Castilla-La Mancha y «es que además ya ha dicho que es consciente del maltrato y desprecio que hemos sufrido últimamente». 
 
plan estratégico. Además ,  dijo en su día que «está dispuesto a poner en marcha un Plan Estratégico para que Cuenca recupere el terreno que se ha perdido durante los tres últimos años». 
         No quiso dejar de lado lo mal que lo está pasando no sólo la ciudad sino también la provincia con las decisiones que está tomando el PP y que está «marginando a los conquenses». Hizo referencia a asuntos como el Hospital Virgen de la Luz de Cuenca, todo lo relacionado con la educación o la supresión de ayudas al Albergue de Transeúntes, que gestiona Cáritas. Unos recortes que se «han hecho de una forma abusiva y eso no tiene perdón de Dios», y lamentó que los populares «no hayan hecho nada para evitar que todo eso afecte a los conquenses».  
 
logros. Respecto a los logros que consiguió durante esta legislatura, destacó que «conseguimos sostener una institución como el Ayuntamiento, que se desangraba, que estaba en la ruina porque había 47 millones de euros de deuda a los bancos y más de 30 millones de facturas sin pagar».
       Sin embargo, ahora las arcas municipales estaban estabilizadas gracias «a un gran esfuerzo de gestión y del sacrificio de los hombres y mujeres de Cuenca». Durante su intervención, dejó bien claro que, sobre todo, «hemos conseguido conservar todos los servicios públicos, como los autobuses que encontramos en huelga cuanto tomamos posesión, y sin despedir a los trabajadores interinos».
      El alcalde reconoció que cuando se presentó hace unos años a las elecciones municipales  tenían un programa ambicioso para Cuenca. Sin embargo,  «hay cosas que todavía no hemos podido poner en marcha, pero nuestra ambición la vamos a aumentar el próximo año porque necesitamos de esa ambición para salir de la situación en que nos encontramos».
     El primer edil afronta con ilusión estos meses porque «tenemos que defender los intereses de la ciudad, y los ciudadanos, que son los que tienen la última palabra».