Colonial y Axiare se fusionan en un 'gigante' inmobiliario

SPC
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La operación de integración da lugar a la mayor compañía cotizada de alquiler de oficinas de España valorada en 11.000 millones de euros, que generará un facturación de 350 millones

Colonial culminó su fusión con la socimi Axiare. Una operación que dio lugar a un nuevo gigante inmobiliario, la mayor compañía cotizada de edificios de oficinas en alquiler del país y una de las primeras de Europa, que suma activos por valor de unos 11.000 millones de euros. El acuerdo se completó ayer al comenzar a cotizar los 19,27 millones de nuevos títulos que la firma presidida por Juan Jose Brugera emitió para atender el canje de acciones con el que materializó la integración de ambas sociedades.

Con este intercambio, la inmobiliaria que dirige Pere Viñolas se hizo con el 13,14% de Axiare, que aún no controla después de que lograra el 86,6% del capital de la socimi con la OPA que le lanzó a finales de 2017. El canje se realizó a razón de la entrega de 1,8554 participaciones propias de nueva emisión  por cada título de Axiare, firma que dejó así de cotizar al cierre del mercado del pasado viernes.

La matriz concluyó de esta forma, y en el plazo estimado de mediados de año, la fusión con la que pretende «consolidar» su posición en el sector de oficinas prime. Asimismo, con la compra, la inmobiliaria pretende «dar respuesta a los actuales retos del sector mediante el fortalecimiento de su posición competitiva, y alcanzando una mayor dimensión y eficiencia del negocio en España», tal como indicó la firma ante la junta de accionistas que aprobó el plan.

No obstante, Brugera no descarta que la integración también genere «duplicidades e incoherencias» en la plantilla resultante, en cuyo caso contempla acometer un «ajuste» en los próximos meses.

Con su fusión, Colonial y Axiare conformarán una compañía patrimonialista con una cartera de activos inmobiliarios por valor de unos 11.079 millones de euros, según las valoraciones de las dos empresas a cierre de 2017, e integrada por edificios de oficinas ubicados en el centro de las capitales Madrid, París y Barcelona.

 De esta forma, el nuevo grupo inmobiliario español se aproxima a Merlín, cuya tasación en inmuebles suma 11.384 millones, si bien esta firma, además de oficinas, cuenta con centros comerciales y logísticos. 

La nueva sociedad generará una facturación por rentas estimada en unos 350 millones de euros al año, importe que ascenderá hasta superar la cota de los 500 millones de euros en el horizonte de 2022.