El Rey subrayó ayer ante los empresarios reunidos en la Asamblea General de la CEOE que para seguir manteniendo el ritmo de crecimiento «sostenido y estable» que España necesita es preciso «garantizar un entorno favorable para la actividad empresarial» que «genere riqueza y empleo».
En el cuarto discurso que Felipe VI pronuncia en lo que va de año, el jefe del Estado alabó el papel desempeñado por la patronal, que agrupa a más de dos millones de empresas y autónomos, por su «vocación de servicio» y por su labor como «ejemplo» del papel que la sociedad civil desempeña «en favor del bien común».
En presencia de la ministra de Empleo, Fátima Báñez, del presidente de la CEOE, Javier Rosell, y del BBVA, Francisco González, en cuya sede se celebró el cónclave de la organización empresarial, el Monarca animó a los industriales a seguir trabajando en favor del crecimiento económico.
«España necesita mantener un ritmo de crecimiento sostenido y estable, y garantizar un entorno favorable para la actividad empresarial, que genere más riqueza y más empleo», sostuvo el Rey.
Don Felipe destacó que «la difícil situación que el país ha atravesado y que aún se manifiesta, sobre todo en materia de desempleo, donde muchos ciudadanos demandan legítimamente oportunidades para poder desarrollar sus proyectos de vida».
El Rey también instó a «mejorar la imagen de España como nación atractiva para el emprendimiento y los negocios» y advirtió sobre la importancia de «mantener la mejor colaboración entre los empresarios y la Administración» para consolidar el crecimiento, «continuar generando empleo y oportunidades, impulsar la competitividad y avanzar en la internacionalización».
El presidente de la patronal, Joan Rosell, agradeció el «inestimable apoyo» de la Monarquía a las empresas nacionales y dedicó unas palabras de agradecimiento a la labor realizada por Don Juan Carlos durante tantos años.
El líder empresarial sostuvo que «los dos grandes agujeros de nuestra economía son el déficit y el desempleo» y que las empresas necesitarán «al menos dos lustros» para recuperarse por lo que «hay que lograr un Gobierno no más grande, sino mejor». También remarcó que «la estructura del Estado está desfasada», que «hay que rechazar el despilfarro del pasado».
RECUPERACIÓN. En este contexto, el presidente de la Comisión de Control Presupuestario de la CEOE, Juan Pablo Lázaro avanzó que la patronal registró unas pérdidas de 181.000 euros en 2015, en contraste con el déficit de 1,1 millones de euros de 2014, lo que significó una mejora del 84%.
Para 2016, la CEOE espera lograr un superávit de 164.000 euros, con unos ingresos de 14,5 millones y unos gastos de 14,1 millones.
Lázaro precisó que este resultado será posible gracias a la congelación de los salarios.