Un derbi para conservar la fe

SPC
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Atlético y Real Madrid se enfrentan en el Wanda con el segundo puesto en juego, que otorga la esperanza de creer que ganar la Liga es todavía un reto posible

Un derbi para conservar la fe - Foto: MARCELO DEL POZO

Como si de una convicción religiosa se tratara, Atlético y Real Madrid (16,15 horas/BeIN LaLiga) no solo compiten hoy de forma directa por la segunda plaza, sino por muchísimo más, por creer que la Liga aún es posible, por doblegar a un adversario directo y por la carga pasional y emocional de un derbi vibrante, tan esencial como inquietante para ambos oponentes. Una experiencia casi divina.

Es un duelo a presión. No hay margen de error. No lo admite la distancia que les separa del liderato del Barcelona, seis puntos en el caso rojiblanco y ocho en el merengue. Ganar o perder. No existen ni términos medios ni excusas. El empate es también una ‘derrota’, una invitación al bloque azulgrana para que acelere hacia el título.

El aliciente es la Liga. La circunstancia añadida es la segunda posición, que comprueba quién está preparado para reabrir el debate por el campeonato. Y solo hay una certeza: el perdedor ya no tendrá ningún argumento.

En ese sentido, la carga emocional es intensa; nada nuevo, en cualquier caso, para dos equipos siempre preparados para la máxima exigencia y para dos proyectos que partieron el pasado verano en la Supercopa de Europa, ganada por el Atlético en la prórroga.

Desde aquel 15 de agosto hasta ahora, el Real Madrid ha sorteado una travesía de vaivenes, al borde del naufragio unas cuantas veces, y con cambio de técnico, Solari por Lopetegui, mientras que el ‘Atleti’ ha sostenido un viaje más constante, al lado del Barça hasta no hace mucho, dentro de la pelea por la Liga.

Pero, en contraste con todo ese desarrollo, irrumpe el momento actual. La escuadra blanca ha enderezado su irregular rumbo del primer semestre con cuatro triunfos seguidos en la Liga, su mejor racha, y por el 1-1 del pasado miércoles contra el Barcelona en el Camp Nou.

Y el conjunto del ‘Cholo’ está en alerta, por la derrota del pasado domingo contra el Betis, que puso fin a una racha de 19 partidos de competición oficial sin perder, que le retrasó un punto más en la carrera por el liderato del campeonato y que exige una reacción inmediata, agotado ya el margen de error en su ambición por la Liga.

La busca en el estadio Wanda Metropolitano, donde ha sido invencible en esta temporada. En la Liga, con nueve victorias y dos empates; en la Champions, con tres triunfos; y en la Copa, aunque su empate con el Girona (3-3) le apartó del torneo.

Son los números en este ejercicio en su campo, sostenidos por las paradas de Jan Oblak y los ataques de Antoine Griezmann. El guardameta y el delantero son de nuevo los líderes del once inicial de Simeone, que encara su vigésimo noveno derbi, con un balance de nueve triunfos, nueve empates y 10 derrotas; aún no recupera a Koke Resurrección y mantiene las bajas de Diego Costa y Savic.

Pero, a la vez, recupera a Diego Godín y Saúl Ñíguez, los dos directos a una alineación titular con el protagonismo de Álvaro Morata, enfrentado contra su pasado y contra el equipo con el que lo ganó todo.

confirmación. También es un derbi trascendental para el Real Madrid. Decisivo, como su mes de febrero. El duelo marca su futuro liguero para reafirmar su reacción, pasando a ser candidato con el salto al segundo puesto en caso de victoria, o instalarse en un negro panorama con una distancia que ya sería insalvable con el líder si sale derrotado del Metropolitano.

Al reencuentro con quien fuera compañero y luego entrenador, el ‘Cholo’, llega Solari asentado en el banquillo madridista, tras superar con nota su primer ‘clásico’. Además, se presentará en el Metropolitano confiado en su once y con el difícil regreso de Courtois, que se reencontrará con la que fue su afición.