El alquiler deja paso a las hipotecas

CARLOS CUESTA (SPC)
-

Los créditos vivienda son los nuevos productos estrella de la banca, que busca captar clientes con ofertas que van del 80 al 100% del capital, pese a que el euríbor está recuperando valor y amenaza con volver a niveles positivos

Después de dos años con un contrato temporal, el joven Germán, ingeniero industrial que trabaja en una fábrica automovilística, acaba de recibir una buena noticia al conocer que finalmente le han renovado y desde el tres de septiembre ya es un trabajador indefinido. Su alegría es compartida con su pareja, Noelia, con la que lleva viviendo todo este tiempo de alquiler y siempre han hablado de que cuando tuvieran empleo fijo intentarían comprar un piso y tener una familia.

Ambos reconocen que, a pesar de que sus salarios aún son precarios para su titulación, ella es aparejadora, sin embargo, las condiciones del mercado son actualmente muy ventajosas, ya que tanto los precios de la vivienda como los tipos de interés para hacer frente a la apertura de una hipoteca son muy inferiores a los de hace una década, antes de que estallara la crisis.

En este sentido, es fácil de comprobar que el sector inmobiliario está poco a poco olvidando la crudeza de la recesión vivida en la última década, en la que el precio de los pisos llegó a depreciarse hasta un 43% y el índice de compraventa quedó prácticamente paralizado por la burbuja del ladrillo.

Si hace solo unos días recordábamos la quiebra del Lehman Brothers por la mala gestión de las hipotecas basura, solo una década después los índices del sector han vuelto a la normalidad y, si nos fijamos en los informes que aporta el Instituto Nacional de Estadística (INE), se observa que el mercado de compraventa residencial ha disparado su avance con un 16,2% registrado el pasado mes de julio, encadenando cuatro meses consecutivos de incrementos.

Además, las tasaciones sobre fincas de segunda mano se incrementaron un 17,2% en este mismo mes, en relación con el mismo período de 2017, hasta totalizar las 38.120, frente a la vivienda nueva que avanzó un 11,4% en tasa interanual, hasta 7.780 transacciones.

Los principales portales inmobiliarios destacan la recuperación y la buena salud que goza este mercado aunque reconocen que la tendencia, pese a que ahora es alcista, camina hacia la normalización, superando los desajustes que acontecieron en los años de la crisis.

El Banco de España destaca que, pese al elevado número de hipotecas que se están contratando en los últimos años, sin embargo, una gran parte de las viviendas que se adquieren se pagan al contado, sin recurrir a financiación bancaria.

Así, la encuesta sobre Préstamos Bancarios publicada por el Banco de España confirma que el mercado hipotecario nacional vive un buen momento de compraventas, tras superar la recesión económica y, de hecho, constata una guerra abierta en la que la banca está hundiendo los precios de sus hipotecas para captar clientes, eliminando, incluso, las comisiones de apertura, debido a la fuerte competencia y, lo que es más grave, relajando los criterios de concesión y volviendo, en muchos casos, a ofrecer el 100% después de años en los que el máximo prestado no superaba el 80%.

El estudio del regulador monetario nacional prevé que esta estrategia financiera se siga prorrogando a lo largo de este año debido al crecimiento que registra la economía española y a la mejora del poder adquisitivo que presentan los demandantes de hipotecas.

Germán y Noelia están negociando la compra de un piso de nueva construcción cuyo valor antes de la crisis superaba los 250.000 euros y ahora le pueden comprar por menos de 200.000. Han visitado ya algunas entidades bancarias y están sorprendidos porque en la mayoría les ofrecen más del 80% y en algunas hasta el 100%. 

Las condiciones que les presentan los bancos para concederles una hipoteca tienen aún un euríbor en negativo a lo que añaden un 0,9%. La cuestión a estudiar por esta pareja es comparar las comisiones, la vinculación que les exigen los bancos en cuanto a domiciliación de nóminas, tarjetas, seguros,... e, incluso, la vida del préstamo que va de los 20 a los 30 años.