El Real Unión de Irún devuelve las dudas a un Conquense sin reacción (4-0)

Área 11 / Guipúzcoa
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Los pupilos de Jordi Fabregat, titubeantes en defensa, carecieron de profundidad ante el equipo vasco y despiden el año en la zona de descenso tras encajar la goleada más abultada del curso

Domínguez trata de llevarse el balón ante varios jugadores del Conquense. - Foto: f.de la Hera / Diario Vasco

La Balompédica puso fin a su buena racha ante un Real Unión de Irún que devolvió las dudas a los blanquinegros, a cuatro puntos de una salvación que se antoja cara. Los hombres de Fabregat mostraron una versión bastante diferente a la de sus últimos duelos y carecieron de reacción tras el gol de penalti de Domínguez. Por si fuera poco, un zapatazo de Alonso al filo del descanso desquició a los visitantes, sin profundidad en el segundo acto.
 
La primera parte del Conquense ya fue para olvidar. La lluvia que cayó sobre el Stadium Gal condicionó el juego de los visitantes, que no consiguieron tomarle el pulso al partido en ningún momento. Tampoco lo logró el cuadro de Zulaika en los instantes iniciales, aunque fue de menos a más. 
 
En esta línea, los vascos dieron el primer aviso en un libre directo. Juan Domínguez la puso y Esnaola remató con todo, pero el balón se marchó alto. 
 
Mucho más asentados en el campo, el Irún mejoró sus prestaciones poco después de sobrepasar el ecuador de este periodo. Así, Seguín ganó la espalda a la zaga balompédica y encaró a Bernabé, quien se vio obligado a derribarle al borde del área. El riojano Álvarez Fernández no lo dudó y señaló la pena máxima, transformada por Domínguez con incertidumbre.
 
El tanto espoleó a los irundarras, que monopolizaron la posesión de la pelota y asestaron otro golpe a su rival antes de encarar el túnel de vestuarios. Mikel Alonso no se lo pensó desde el balcón del área y soltó un zapatazo que sorprendió a Bernabé. Todo un mazazo para los de Cuenca, cuyo bagaje ofensivo se redujo a un disparo sin demasiada convicción de Óscar Vega que el meta Tena atajó sin problemas.
 
Sentencia. La remontada del Conquense no llegó en el segundo tiempo, donde los guipuzcoanos reclamaron un posible penalti sobre Domínguez. Poco después, los pupilos de Zulaika sentenciaron con un cabezazo de Silas, bien asistido por Morcillo.
 
El Conquense trató de dar un paso al frente con la entrada de Dani, Varela y Reina, pero Azkoiti dio la puntilla a los blanquinegros. Una amarga despedida de año.
 
Fabregat: «Nos vamos a casa chafados, pero debemos ser optimistas»
El entrenador del Conquense, Jordi Fabregat, no pudo ocultar su cara de disgusto al término del encuentro, aunque se mostró optimista de cara al futuro: «Lógicamente, nos vamos a casa chafados. Sin embargo, debemos ser optimistas. En las últimas semanas, el equipo estaba en una línea ascendente y esa es la línea a seguir».
 
El preparador catalán hizo autocrítica y aseguró que «no nos salió absolutamente nada. El Real Unión no nos dejó desarrollar nuestro juego en ningún momento y la lluvia tampoco nos ayudó. Hasta la media hora, supimos defendernos, pero luego llegó la jugada del penalti y el segundo gol. Ese tanto nos hizo mucho daño y en la segunda mitad ya no fuimos capaces de sobreponernos. Hay que olvidar este tropiezo cuanto antes. Tras las Navidades, regresaremos más fuertes».
 
Ficha técnica:
 
Real Unión de Irún: Tena, Urkizu (Arkoiti, 73’), Esnaola, Aimar, Morcillo, Silas, Mikel Alonso, Iker Rodellar, Seguín (Eneko Romo, 80’), Juan Domínguez y Goikoetxea (Galán, 76’).
 
Conquense: Bernabé, Sendoa, Omar, Picón (Manu Reina, 75’), Royo, Salero (Varela, 75’), Curro Vacas (Dani, 64’), Borja Hernández, Pituli, Vega y Óscar Vega.
 
Árbitros
Álvarez Fernández, del comité riojano. Amonestó a los locales Urkizu, Mikel Alonso y Silas, así como a los visitantes Picón y Salero.
 
Goles 
1-0 (minuto 33). Juan Domínguez, de penalti. 2-0 (minuto 42). Mikel Alonso. 3-0 (minuto 59). Silas. 4-0 (minuto 81). Azkoiti.