Avance sigiloso de los tumores

D. Guijarro
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Uno de cada cuatro fallecimientos que se produjeron en 2013 fue por un cáncer

Desde hace siglos la medicina y la enfermedad libran una particular carrera en la que el objetivo es siempre lograr una cura para aquellos nuevos males que no dejan de surgir. En los últimos años la lucha se centra en buscar una solución a los distintos tipos de cáncer que cada vez afectan a más personas y de una forma más agresiva y efectiva.
A pesar de todos los avances científicos que se anuncian casi a diario en esta lucha, de momento los tumores parecen ir acrecentando la ventaja de la que parecen disponer desde la antigüedad pues los primeros tumores de los que se tienen constancia en el año 3000 antes de Cristo con referencias en el Antiguo Egipto y pruebas encontradas en los cuerpos de algunas momias.
Más de 5.000 años después los tumores siguen campando a sus anchas y aunque ha habido multitud de avances, muchos de ellos se pueden curar, son ya la segunda causa de muerte en la provincia de Cuenca sólo por detrás de las enfermedades del sistema circulatorio que siguen ocupando el dudoso honor del primer puesto del ranking.
Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre las causas de mortalidad en 2013, publicadas esta misma semana, los tumores representaron durante ese año uno de cada cuatro fallecimientos. 
En ese periodo de tiempo se produjeron 2.395 muertes en Cuenca, de las que 622 fueron debidas a la presencia de un tumor. Un dato que creció un 2,3 por ciento respecto a 2012 cuando sólo se produjeron 608 de un total de 2.471 defunciones.
 
Los más comunes. Dentro de la treintena de  categorías en las que el INEagrupa los tumores, los más frecuentes en Cuenca son los tumores malignos de la tráquea, de los bronquios y del pulmón que con 90 casos supusieron el 14,4 por ciento del total. Le siguieron de cerca los tumores de colón con el 12,8 por ciento y 80 casos que terminaron con trágico desenlace.
En comparación con los tumores más mortales el año anterior se observa, en base a las estadísticas oficiales, cómo los de colon han sufrido un incremento cercano al 20 por ciento ya que en 2012 sólo 67 de estos casos no tuvieron solución para el paciente. Del mismo modo, los cánceres relacionados con el sistema respiratorio retrocedieron en mortalidad al pasar de 114 casos a 90, lo que implica una reducción del 21 por ciento en un año. El tercer grupo de tumores más peligroso fue el relacionado con los tejidos linfáticos con 40 casos. 
Aunque cuando diagnostican un tumor bajo el calificativo de benigno los pacientes tienden a pensar que no son peligroso, los datos del INE demuestran que, aunque en mucha menor medida, éstos también pueden llegar a causar la muerte, como sucedió en cinco ocasiones.  
 
El número uno. A pesar del avance en el número de tumores para los que sus enfermos no tuvieron remedio, la principal causa de muerte en la provincia fue las enfermedades relacionadas con el sistema circulatorio. Éstas supusieron el 30,8 por ciento del total con 740 defunciones.
Dentro de esta categoría las enfermedades cerebrovasculares, con 177 diagnósticos, el 23,9 por ciento de los casos, es la primera causa. Tras ellas se sitúan las dolencias del corazón y las insuficiencias cardiacas que suman 254 casos. A mayor distancia están los infartos agudos de miocardio con 95 desenlaces fatales.
Dentro de las causas de muerte externas, entre las que las estadísticas engloban 95 sucesos, destacan las caídas accidentales que acabaron con la muerte de 36 personas en Cuenca, más que los accidentes de tráfico en los que sólo se produjeron 13 víctimas mortales.