Mariscal muestra su compromiso con el Ciudad Encantada y ensalza sus valores

Héctor Madrigal
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El alcalde recibió a la plantilla conquense, que difunde «la imagen y la cultura» de la capital

El Ayuntamiento de Cuenca «mantendrá su apoyo» al Ciudad Encantada y «buscará más recursos» para ayudar en la medida de sus posibilidades al club. Así lo aseguró ayer el alcalde de la capital, Ángel Mariscal, durante la tradicional recepción a la plantilla y el cuerpo técnico de la entidad. 
 
En su alocución, el primer edil aseveró que el Globalcaja «difunde la imagen y la cultura de la ciudad por las grandes capitales de España». Ventajas que, a su juicio, «debemos aprovechar».
 
Mariscal ensalzó los valores que representa el equipo conquense, como «el esfuerzo y el sacrificio», y realzó sus escuelas deportivas, que permiten que los más pequeños se inicien en este deporte. 
 
En esta línea, el alcalde recordó que el Ciudad Encantada será uno de los estiletes de la ciudad en 2016, año en el que se conmemorará el vigésimo aniversario de la declaración de Cuenca como Ciudad Patrimonio de la Humanidad.
 
Asimismo, Mariscal mostró su compromiso de «reforzar» la campaña ‘Cuenca juega limpio’ y deseó «mucho éxito» a la plantilla: «Esperamos lo máximo de vosotros. Entre todos, estoy convencido de que saldremos adelante».
 
Un discurso que compartió el concejal de Deportes, José María Martínez, quien valoró los méritos del Ciudad Encantada. «Sois la joya del deporte de esta ciudad y aportáis grandes valores. Sólo os pedimos comprensión», declaró.
 
Potencial. Las palabras de Mariscal y Martínez agradaron al presidente del Ciudad Encantada, Isidoro Gómez-Cavero, quien hizo hincapié en que «no vamos a exigir nada al Ayuntamiento, pero sí que nuestra intención es reunirnos y buscar soluciones»
 
El máximo responsable del club afirmó que «el balonmano es, junto a la Semana Santa, lo más importante de Cuenca. La gente debe darse cuenta de este potencial para que la ciudad sea más grande. Nos vamos a dejar la piel para estar arriba y llenar El Sargal».