El número dos de los socialistas en Castilla-La Mancha, Sergio Gutiérrez, aseguró esta mañana que «el empleo es la principal promesa cumplida» de Emiliano García-Page. Aseguró que se ha puesto a trabajar con una estrategia transversal en la que lo mismo se incentivan las inversiones de empresas, como a los emprendedores que quieren montar un negocio o se dan 60.000 oportunidades a parados de larga duración a través de los planes de empleo. «El Gobierno ha conseguido que el empleo fuera su primer objetivo, su objetivo principal y ahora sea su primera promesa cumplida, su gran promesa cumplida», apuntó.

Gutiérrez destacó que esta estrategia no para en agosto y por eso hizo hincapié en la reciente convocatoria de ayudas para que las empresas e instituciones puedan contratar a jóvenes titulados durante doce meses. La subvención llega a los 10.000 euros por joven contratado y en total se ha presupuestado una partida de 8,3 millones de euros. Señaló que es clave que se tomen medidas para los jóvenes desempleados, pues reconoce que es un colectivo de los que más sufrió durante la crisis económica. Recordó que además se suma a otra herramienta puesta en marcha, la del plan del retorno del talento.

Pero además de favorecer a los jóvenes en concreto, Gutiérrez aseguró que esta convocatoria de ayudas «es una pieza más de una estrategia transversal para la recuperación del empleo y del empleo de calidad». El secretario de Organización del PSOE señaló que esas medidas están dando sus frutos. Por eso destaca que Castilla-La Mancha lidera la captación de inversión extranjera, la creación de empresas o la generación de empleo.

Y 12,7 millones para formar a ocupados. Además hoy se ha publicado en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha la convocatoria de formación profesional para el empleo dirigida a personas ocupadas. Se trata de una convocatoria que cuenta con una dotación presupuestaria de 12,7 millones de euros para este año y el que viene. Solo en 2018 supondrá la realización de 733 cursos que beneficiarán a casi 11.700 trabajadores.

Tendrán prioridad para participar en las acciones formativas las mujeres, los mayores de 45 años, las personas con necesidades formativas especiales y las víctimas del terrorismo y de la violencia de género, así como las personas pertenecientes a sectores en crisis o reconversión y con baja cualificación, y personas desempleadas de larga duración, con poca cualificación, o jóvenes que hayan abandonado de forma temprana el sistema educativo y personas en riesgo de exclusión social. El plazo de solicitudes termina el 12 de septiembre.