Como casi siempre, la carrera por las calles de Montecarlo disputada ayer había transcurrido sin demasiadas sorpresas. Algo habitual en un trazado espectacular, pero poco propicio para los adelantamientos. Sin embargo, todo cambió en los instantes finales del Gran Premio de Mónaco, cuando un error de estrategia de Mercedes permitió a Nico Rosberg superar al intratable líder de la prueba, su compañero, Lewis Hamilton, para alcanzar su tercer victoria consecutiva sobre el circuito urbano del Principado. El británico no solo perdió el primer lugar, sino que se vio relegado al tercer puesto del cajón, pues Sebastian Vettel (Ferrari) aprovechó el fallo de la escudería alemana para adelantarle. En cuanto a la participación española, Fernando Alonso (McLaren) tuvo que abandonar por problemas en la caja de cambios, Carlos Sainz (Toro Rosso) concluyó décimo y Roberto Merhi (Manor) acabó en la última posición.
Hamilton, ‘poleman’ del pasado sábado, defendió bien su primera posición en la salida ante Rosberg, mientras, por detrás, el ruso Daniil Kvyat (Red Bull) adelantó a su compañero, el australiano Daniel Ricciardo, para presionar a Vettel. También consiguió ganar posiciones Alonso, que logró ponerse undécimo tras superar al brasileño Felipe Massa (Williams) y al alemán Nico Hulkenberg (Force India). Sin embargo, en su última maniobra de adelantamiento, tocó el monoplaza del germano, que rompió el alerón delantero, por lo que fue penalizado con cinco segundos por esa acción. Asimismo, el holandés Max Verstappen (Toro Rosso), compañero de equipo de Sainz, pugnó con el venezolano Pastor Maldonado (Lotus), un acoso que terminó con el sudamericano fuera de carrera.
En la cabeza, Vettel se acercaba a Rosberg mientras el alemán se alejaba de su compañero de equipo. Sin embargo, solo unas vueltas después, los Mercedes se vieron frenados por diversos problemas de carrera: tráfico, fallos mecánicos... Además, el castellonense Roberto Merhi cerraba la clasificación mientras los otros dos españoles seguían luchando por los puntos. Así, tras cumplir la sanción, Alonso se puso noveno; y Sainz, por su parte, protagonizó una espectacular remontada saliendo desde el ‘pit-lane’ -por la penalización por saltarse el pesaje en la calificación-, y esperaba la zona de ‘DRS’ para superar al sueco Marcus Ericsson (Sauber).
En ese momento, la mala suerte volvió a cebarse con el asturiano. Si en Montmeló eran los frenos los que dejaban fuera de combate al bicampeón del mundo, en Montecarlo fueron problemas en la caja de cambios. Así, Alonso, que tampoco pudo concluir la clasificación por problemas electrónicos en el coche, se quedó parado en el mismo lugar que el pasado sábado, en la curva a derechas de Santa Devota. Con el abandono del de Oviedo, Sainz subió una posición, dos cuando su compañero Verstappen paró en ‘boxes’.
Precisamente, el holandés hizo ondear la bandera amarilla tras un espectacular accidente por un toque con el francés Romain Grosjean (Lotus). A pesar del impacto, el joven piloto pudo salir por su propio pie.
El incidente fue aprovechado por muchos corredores para hacer su parada en ‘boxes’, entre ellos Hamilton, que, incomprensiblemente, cedió el liderato y salió tercero, por detrás de su compañero de equipo, nuevo líder de la carrera, y Vettel. Una vez se fue el coche de seguridad, Rosberg se escapaba mientras su compatriota taponaba al británico.