La Feria de San Julián 2014 ya es historia. Apenas una semana después de bajar el telón, Maximino Pérez hace balance para La Tribuna de Cuenca del ciclo taurino conquense. “Artísticamente la feria ha sido buena, porque ha habido siete triunfos de puerta grande y faenas muy interesantes. Y lo ha sido a pesar de ser una feria muy mal matada, y es que se han pinchado 32 toros de 35 que se han lidiado, así que imagínate si la espada hubiese funcionado bien”, apunta el empresario. Esa es su “única decepción”, pues de lo contrario el balance “hubiese tenido un resultado extraordinario”.
En cuanto a la respuesta de la afición, Maximino Pérez se muestra muy satisfecho por cómo se han comportado los abonados, “ya que hemos repetido las mismas cifras que el año pasado, y eso en la tesitura en la que estamos no es nada fácil”. No obstante, apunta, “la venta de entradas sueltas ha estado un poco por debajo de lo que yo esperaba, la verdad”. Con estos mimbres, el máximo responsable de Maxitoro lo tiene muy claro: “el objetivo de esta empresa es mejorar año a año, y si la feria taurina de 2014 ha sido buena, habrá que trabajar mucho y lo mejor que sabemos para que la de 2015 sea igual o mejor todavía”. Para ello, además de abanderar la receta fundamental del trabajo, “habrá que seguir repitiendo las cosas buenas que hacemos, mejorar aquello no tan bueno, e inventar cosas nuevas que nos diferencien del resto”.
TARDE POR TARDE. En un repaso más detallado tarde por tarde, Maximino Pérez destaca de la primera de feria “la sensacional faena de Perera pinchada con la espada al tercero de la tarde y los veinte muletazos de Morante al cuarto”. De la segunda de abono le gustaron “los dos novillos de Miranda y Moreno y el triunfo importantísimo de Aitor Darío “El Gallo”, pues Fortes mató mal a sus dos toros, Juan del Álamo estuvo a mucho menos nivel de lo que esperábamos, y Luque sorteó el lote más complicado”. De la tercera gana por goleada “el faenón de El Juli al quinto de Daniel Ruiz, ya que no se le puede pedir más a una máxima figura en pleno mes de agosto, que puso tantísimo conocimiento y esfuerzo para triunfar en una plaza como Cuenca”.
Con respecto al mano a mano de rejones el empresario argumenta que “Diego Ventura jugó en otra galaxia”, y que “no hubo comparación”. “Resultó muy bonito, pero no existió, pues para que haya mano a mano hay que igualar más las fuerzas, y había muchísima desproporción”, sentencia. Finalmente, de la corrida que cerró feria, “me quedo con algunos trazos de las faenas de Padilla en ambos toros, y con la emoción de vivir el momento del que fue el último toro de San Julián, el sobrero de Los Chospes que toreó Iván Fandiño”.
A nivel ganadero Maximino Pérez se queda con la corrida de Daniel Ruiz, “por ser la más completa”; aunque también le gustó la de Pallarés, hierro del que hay que decir que no tiene toros para el año que viene. “Por eso lo digo a un año vista, por si alguno se pregunta por qué los toros de Pallarés no repiten a pesar del buen juego de este año”, dice. De esta forma, explica, “Daniel Ruiz, si no pasa nada, repetirá, pero el resto hay que meditar y darle muchas vueltas”. Ahora mismo, concluye, “faltando un año no puedo aventurarme a decir cuales repiten y cuales no”.