José Luis Martínez Guijarro (Cuenca, 1968) se ha convertido en el hombre fuerte del Gobierno que preside Emiliano García-Page, que le ha confiado la Vicepresidencia. No en vano, es la persona con más experiencia política y en gestión pública del Ejecutivo ya que lleva desempeñando tareas de responsabilidad en la Junta desde hace más de 20 años. Una experiencia de la que hace gala y en la que se basa para coordinar las medidas del Gobierno regional.

Es el único miembro del Gobierno que también fue de la etapa de Barreda, cuando por primera vez los castellano-manchegos le retiraron su apoyo mayoritario al PSOE. ¿Qué lección ha aprendido? ¿Qué error cometieron que no hay que volver a repetir?

Son momentos distintos. No tiene nada que ver la etapa 2007-2011 en pleno apogeo de la crisis económica donde se intentó salvaguardar el nivel de prestación de servicios con al que hay en estos momentos en la que desgraciadamente se en los últimos cuatro años se ha llevado a cabo un proceso de destrucción de los servicios públicos, de eliminación de derechos sociales. Creo que al final lo que se ha aprendido es que ante cualquier crisis económica hay que tener muy en cuenta a las personas. Tienen que estar muy presentes en cualquier decisión política que se tome pero ante una crisis económica con más motivo porque al final son personas concretas las que acaban por pasarlo mal.

Usted ha conocido las mayorías absolutas como Gobierno y  como oposición. Ahora la historia ha cambiado. ¿Qué tiene de bueno y qué de malo la situación actual?

Hay un mensaje claro de los ciudadanos que pasa porque las distintas fuerzas políticas nos pongamos a dialogar. Creo que los votantes han puesto el diálogo como norma de funcionamiento en esta legislatura y, yo estoy convencido, en legislaturas futuras, tanto en la Administración regional como en muchos Ayuntamientos y casi con seguridad el próximo Gobierno de España será fruto de un pacto entre varias formaciones políticas. Es el mensaje claro para que entre todos intentemos buscar las soluciones a los problemas de los ciudadanos y eso a la larga es positivo.

El PSOE necesitaba a Podemos para la investidura de Page, pero  también para aprobar leyes o sacar los Presupuestos. ¿Cree que todo va a ir tan fluido como en este inicio de legislatura o hay riesgo de que esta relación se vuelva difícil?

Hasta ahora lo que hay es un acuerdo de investidura con una serie de acuerdos que se tienen que desarrollar en los próximos meses. Luego a lo largo de la legislatura habrá que seguir hablando y negociando pero con un planteamiento claro de recuperación de servicios públicos, derechos sociales y preocupación por las personas que peor lo están pasando hay un marco lo suficientemente ancho para entenderse con Podemos. Ése es el objetivo que nos marcamos basado en hablar mucho. Lo hicimos para la investidura y estoy seguro que lo podremos seguir haciendo.

En la gestión del nuevo Ejecutivo, ¿qué porcentaje de responsabilidad tendrá Podemos en los éxitos o los fracasos del Gobierno?

El Gobierno va a llevar a cabo el programa con el que el partido socialista se presentó a las elecciones. Es un Gobierno sustentado por el partido socialista con su programa al que se han añadido propuestas por Podemos que en absoluto chocaban y que en muchos casos estaban previstas en nuestro programa con otra denominación.

Usted fue uno de los ‘negociadores’ con Podemos. ¿A qué les tuvo que decir que no?

Desde el primer momento la negociación fue muy franca y muy sincera. Pesó más la responsabilidad de revertir la situación que se estaba viviendo con un Gobierno alejado de la realidad social. Desde el primer momento fuimos conscientes de que debíamos dejar aparcados los planteamientos que nos pudieran distanciar y centrarnos en lo que nos unía. Por eso fue relativamente fácil llegar a un acuerdo. No hubo que decir que ‘no’ a nada sino ajustar plazos o cuestiones en algunas de las medidas. Ellos denominaban Plan de Rescate Ciudadano y nosotros de Empleo, o Lucha contra la pobreza pero al final hablamos de lo mismo.

Cambiar las ayudas de la Dependencia, becas de comedor escolar, reabrir escuelas rurales, un plan de choque para parados... Todas esas medidas son de aplicación de inmediata y a la vez el Gobierno de España no flexibiliza el objetivo de déficit. ¿De dónde se va a sacar el dinero?

Es una cuestión de priorizar dentro de los presupuestos una serie de actuaciones destinadas a resolver los problemas más urgentes. En el Plan de Choque contra el desempleo no sólo se puede implicar el Gobierno regional sino que tienen que hacerlo el resto de administraciones, desde el Estado a las Diputaciones pasando por los Ayuntamientos. Hay que pedirle al Gobierno de España que cambie la distribución de los objetivos de déficit para que se flexibilice el de las comunidades porque son las que prestan los servicios más básicos y directos a los ciudadanos como son la educación, la sanidad y los servicios sociales. Haciendo las dos cosas simultáneamente pueden surgir recursos suficientes.

Page quiere una auditoría de la situación financiera de la Junta. El anterior consejero presentó las cuentas ante notario. ¿Hay algo concreto que teman encontrar?

No es que queramos prescindir de los notarios que son una figura relevante desde el punto de vista social pero creemos que deben ser los propios funcionarios de la comunidad los que hagan una radiografía de cómo está la situación financiera y con total normalidad la expondremos en las Cortes para que los ciudadanos la conozcan y todos seamos conscientes de la situación y de las posibilidades que a partir de ahí tenemos de cara al futuro.

También quieren revertir el funcionamiento de Rtvcm, empezando por el relevo de su director. En el caso del Ente público ¿hay que volver a la situación que había en 2011 o mejorarla?

Hay que plantear un nuevo modelo de televisión pública que es lo que demanda la sociedad. Los castellano-manchegos no entienden la cerrazón del actual director de permanecer en su puesto contra viento y marea, o la del PP de no querer facilitar la renovación del Consejo de Administración. Debemos ir hacia un modelo en el que se garantice la igualdad y la objetividad y que la televisión regional sea la locomotora de un sector económico que cree empleo en la región como es el audiovisual. Tiene una dinámica de producción de programas que debemos utilizar para poner en marcha toda una industria audiovisual en la región.  Con respecto al modelo propio de la televisión estamos viendo cómo acercarnos al de TVE de la anterior etapa donde todo el mundo reconoce que el nivel de objetividad  pluralidad aumentó de una manera significativa.

El Gobierno quiere poner en marcha un plan de choque este agosto para parados de larga duración.  ¿A medio plazo cuáles son sus planes para que haya más empresas o que las empresas generen más puestos de trabajo?

Para que haya más empresas y que generen empleo se necesita un cambio en el modelo productivo. Esto es lo que queremos determinar con empresarios y sindicatos en el Pacto de Recuperación Económica del que venimos hablando en los últimos días con los agentes sociales y creemos que se deben sumar también los partidos políticos. Pero hay muchas familias que no puede esperar a que haya un proceso de recuperación económica. Hay casi 90.000 familias que tienen a todos su miembros en el paro y muchas de ellas no reciben ninguna prestación.

Ya han empezado los contactos para reformar el Estatuto.  ¿En qué notarán los ciudadanos que recoja nuevos derechos?

Lo tienen que notar primero antes del Estatuto en que se recuperen esos derechos. Durante estos cuatro años se han perdido muchos derechos sociales y laborales de los empleados públicos fundamentalmente por lo tanto lo primero que tenemos que hacer es recuperarlos. Una vez conseguido lo que tenemos que hacer es blindarlos para que nunca más ningún Gobierno tenga la tentación de volver a eliminarlos. Lo mismo que pensamos que cuando se modifique la Constitución hay que blindar determinado tipo de derechos, eso tiene que tener su traslación en el Estatuto.

Plantean cambiar la Ley Electoral y Page ya dijo que quiere hacerlo con acuerdo, al igual que Barreda y Cospedal y luego no fue así. ¿Cómo lo van a hacer para romper esa dinámica de leyes electorales reformadas sin unanimidad?

Creo que hay que hacer un acuerdo no sólo con los grupos políticos presentes en las Cortes sino sentando a la mesa a aquellos partidos que concurrieron a las elecciones y no obtuvieron representación, algunos por el propio diseño de la ley. Podemos tener ejemplos de legislaciones en Europa estables que no han sido tocadas y que pueden ser extrapolables a la realidad de Castilla-La Mancha.

Es el miembro del Gobierno que más ha hablado ante los medios. ¿Asume que como vicepresidente le va a tocar apagar fuegos? ¿Teme quemarse?

Como vicepresidente hay una tarea fundamental de coordinación del trabajo del Ejecutivo y luego asumo la portavocía del Gobierno y soy el responsable directo en la relación con los medios. El presidente ha conformado un Gobierno incorporando personas con gran experiencia en sus ámbitos profesionales pero que son nuevos desde el punto de vista de la responsabilidad en la gestión. Por eso me toca en estos primeros momentos explicar de una manera más activa la acción del Gobierno pero seguro que según vayan pasando las semanas cada miembro irá asumiendo el protagonismo en cada una de sus Consejerías. En ese momento mi labor será más de coordinación que de explicación.

En la comparecencia que hicieron todos los miembros del Gobierno en las Cortes, su exposición fue una de las más criticadas por el PP por los contratos de Geacam a su hermano ¿Entiende que estas explicaciones no convenzan al PP?

Cuando se planteó la comparecencia de los miembros del Gobierno con carácter previo, la principal figura con trayectoria política y responsabilidades de gestión era yo, y era consciente que sería el objeto de los ataques del PP porque era difícil que pudieran hacerlo a otros miembros que se incorporaban por primera vez a la actividad política. Salí satisfecho porque por primera vez tuve la oportunidad de explicar cómo habían sucedido las cosas y dejarlo  meridianamente clara. Por mucho que se quiera tergiversar la realidad es la que es. Desde ese punto de vista las explicaciones fueron suficientes, pero entiendo que para el PP no lo hubieran sido de cualquier forma porque su objetivo era criticarme.

En la pasada legislatura su grupo acusó a Cospedal de utilizar el trasvase para ganar votos en Levante. ¿Con el nuevo escenario político en la región y en Valencia volverá a abrirse la ‘guerra del agua’?

Nosotros tenemos que defender los intereses de Castilla-La Mancha y revertir la situación que hay en estos momentos en materia de agua. En los últimos años los intereses se han vendido al Levante. Se aprobó un protocolo que luego se trasladó a la normativa legal que no favorece en nada el desarrollo de la región. Tenemos que defender el agua de nuestros ríos y es una cuestión de defensa de los intereses territoriales. Lo haremos frente al Gobierno de España o de cualquier otra comunidad autónomas sea del signo político que sea. Lo hemos hecho en otras ocasiones.