La noche en la sede socialista estuvo repleta de emociones encontradas porque el candidato a la Alcaldía por el PSOE, Juan Ávila, sacó menos concejales que el PP, aunque aún no se sabe quien gobernará todavía, pero estarán pendientes de los pactos, sin embargo la victoria de García-Page en la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha les inundó de alegría y satisfacción.
«Queda mucho que hablar durante los próximos días» afirmó Ávila ante el resultado de las elecciones municipales en las que el PP obtenía 10 concejales, el PSOE nueve, Izquierda Unida lograba tres mientras que Ciudadanos conseguía otros tres. Sus primeras palabras fueron de agradecimiento a los alrededor de 9.200 conquenses «que nos han dado su voto en estos comicios». Gracias a todos los interventores, apoderados que han hecho posible un trabajo «muy importe no sólo durante la campaña electoral sino también en las semanas y meses anteriores».
La candidatura del Partido Popular al Ayuntamiento ha sido la más votada y los resultados electorales son unos «resultados que nos van a impulsar a todos a la necesidad de diálogo porque queda mucho por hablar en los próximos días, sobre todo, debido al resultado que hemos obtenido en las elecciones autonómicas».
Por tanto, lo importante es reconocer los datos y «quedan días muy largos que ya iremos hablando y comentando a los medios de comunicación el resultado de esas conversaciones». Ávila mostró también su agradecimiento durante su intervención al PSOE y «muchas gracias por vuestra colaboración y vuestra ayuda, compañeros y compañeras».
El secretario provincial del PSOE y el cabeza de lista de la candidatura socialista a las Cortes regionales por Cuenca, José Luis Martínez Guijarro, dio también las gracias a los «hombres y mujeres que hemos estado trabajando muy bien». Recordó que en la provincia de Cuenca ha funcionado la Ley electoral de Cospedal porque «hay 20.000 votos de conquenses que no tienen representación en las Cortes de Castilla-La Mancha, ese es el objetivo que perseguía la presidenta de la Junta».
«Devolver la dignidad»
Lo consiguió, agregó, en Cuenca y Ciudad Real, pero no lo ha conseguido en ninguna de las otras tres provincias, es decir, que «no lo ha conseguido en una región como Castilla-La Mancha así que la Ley trampa de Cospedal se le volvió en contra a ellas misma».
Confesó que en los últimos días hubo momentos de «mucho ajetreo y de mucho trabajo», pero quiso decir a los conquenses que el próximo gobierno de Castilla-La Mancha, «va a trabajar por devolver a Cuenca la dignidad que le quitó el Partido Popular».
Martínez Guijarro señaló que iban a volver a abrir los colegios y a devolver la dignidad a los profesionales de la educación y la sanidad «en esta provincia». Además, dijo que iban a trabajar por reconstruir lo que había «destruido Cospedal durante estos cuatro años».
En la próxima legislatura, agregó, van a ser de «mucho diálogo, pero al PSOE nadie le puede dar lecciones de diálogo porque llevamos muchísimo tiempo dialogando con mucha gente en esta provincia de Cuenca».
Por último, agradeció el trabajo de los socialistas conquenses y «estoy seguro que estos cuatro años iban a ser duros, pero que van a ser reconfortantes porque vamos a ver como los ciudadanos recuperar esa dignidad que nos ha quitado el Partido Popular».
La incertidumbre fue la gran protagonista durante toda la jornada electoral porque la lentitud del escrutinio hacía que mucho tiempo estuvieron empatados tanto el PSOE y el PP en el Ayuntamiento aunque con el 82% de los votos los populares, aunque aún no es oficial, sacaban 10 concejales, lo que suponía perder dos, y 9 el PSOE, que significaba la pérdida cuatro concejales. La tensión y los nervios aparecieron durante la tarde, pero se transformó en alegría porque todo puede pasar con los pactos con otras fuerzas políticas.