Dar un paso adelante y reaccionar. El Ciudad Encantada está obligado (18,30 horas) a mejorar sus prestaciones y disipar dudas en la pista del BM Benidorm tras verse sorprendido en casa por el Puerto Sagunto y pagar caro su desacierto. Un duelo de alto voltaje, de máxima exigencia física, ante un rival directo por esquivar el descenso que tampoco despega pese a contar con una plantilla de nivel.

 

«No tenemos ninguna cuenta pendiente, pero sí que es prioritario sumar», reconoce el técnico Lidio Jiménez, con todos sus guerreros a punto para buscar la segunda victoria a domicilio de la campaña. La misión está cargada de obstáculos, aunque los conquenses son conscientes de que lo primordial es mirarse a sí mismos: «Los errores nos están costando puntos importantes. Fallamos demasiados contraataques y penaltis».

 

Ante ese handicap, el preparador del Globalcaja incide en que «el trabajo psicológico» resulta fundamental. «Nuestro problema es mental, pero este equipo es capaz de hacer las cosas bien. Es cuestión de creer y meter esos lanzamientos fáciles, lo que nos daría mucha más seguridad», explica.

 

Lidio Jiménez confía en que el bloque recupere su mejor balonmano en el Palau d’Esports L’Illa y deja claro que «competir no es suficiente. Necesitamos ganar después de sufrir una derrota». Para ello, el míster avanza que «habrá que hacer un grandísimo partido y rozar la perfección».

 

Optimismo. El triunfo cosechado ante los alicantinos en El Sargal marca el camino a seguir. «Podemos ganarle a cualquier si estamos a nuestra mejor nivel», enfatiza el entrenador, consciente de que «hay jugadores que no están en su mejor momento. El otro día nos faltaron los goles de Thiago, Rafa López y de los pivotes. Es crucial que todos aporten para poder vencer».

 

Lidio muestra una fe incondicional en todos sus pupilos, incluido Dani Tolmos. «He hablado mucho con él. Estoy tranquilo porque trabaja muy bien y tiene unas grandes cualidades. Es un jugador que se ha reconvertido a extremo tras jugar como central y que tan solo tiene 22 años», reitera.

 

Con este panorama, las consignas están muy claras. «Hay que defender más que el otro día y atacar mejor. No podemos dejarles correr ni pensar en el Teucro porque está es nuestra primera final», concluye Lidio, convencido de lograr la victoria «si hacemos bien el trabajo».

 

El análisis del rival