La hora de la revancha

DPA / Madrid
-

España, que debuta hoy ante Irán, tiene la gran oportunidad de desbancar a Estados Unidos

La hora de la revancha

España ya no quiere más derrotas honrosas ante Estados Unidos. Tras perder las dos últimas y trepidantes finales olímpicas, el Mundial en casa que comienza hoy puede ser la gran oportunidad, no solo para ganar el título, sino para batir por fin al equipo de la NBA.

La imagen de LeBron James y Kobe Bryant felicitando a Pau Gasol tras la final de Londres 2012 fue el reconocimiento a un bloque capaz de desafiar a las grandes estrellas, pero víctima siempre: en Atenas 2004, en Pekín 2008 y en la capital británica.

El oro olímpico es lo único que se le ha resistido al combinado nacional, ganador de nueve medallas desde 2001. Pero siempre quedan asignaturas pendientes. En el camino al oro en Japón hace ocho años nunca se cruzó con Estados Unidos, campeón del mundo en 2010 sin chocar con una España que abdicó en cuartos.

«Nosotros tenemos un equipo hecho», comparó Pau Gasol antes de un evento ideado para que los dos grandes favoritos no se vean las caras hasta una hipotética final en Madrid el 14 de septiembre.

No falta nadie en el plantel de Juan Antonio Orenga, que tras la pausa de 2013 por diversos problemas, recupera a los veteranos Gasol, Juan Carlos Navarro y Felipe Reyes y al fornido Serge Ibaka.

La experiencia, el conocimiento de un bloque que lleva más de 10 años acumulando éxitos y un juego interior temible con Pau, Marc e Ibaka colocan a la escuadra anfitriona a la misma altura que unos Estados Unidos sin James ni Bryant, activados solo en el modo olímpico, y que a diferencia de España han ido perdiendo por lesiones o decisiones personales a Blake Griffin, Paul George, Kevin Love y a Kevin Durant, el MVP del Mundial de hace cuatro años.

«Para mí, Durant es el más importante. Ha hecho una grandísima temporada y es una baja sensible, pero siguen teniendo un muy buen equipo, con jugadores con mucho talento y veremos cómo juegan el campeonato», precisó cauto Pau Gasol.

La selección debuta hoy  ante Irán en Granada, donde en la primera fase también le desafiarán Egipto, Brasil, Serbia y Francia, los otros integrantes del Grupo A.

Un rival más débil. De cara a su primer compromiso, la anfitriona dispone de potencial sobrado para solventar sin problemas su duelo ante Irán, uno de sus rivales más débiles. El vigente campeón de Asia tiene como líder indiscutible a Hamed Haddadi, primer jugador de su país en la historia de la NBA y que compartió vestuario con Marc Gasol en los Grizzlies.

Mientras tanto, EEUU estará en el grupo C, en Bilbao, con Finlandia, República Dominicana, Nueva Zelanda, Turquía y Ucrania. En la segunda fase, a partir de octavos, los hombres que dirige Mike Krzyzewski jugarán en Barcelona y los anfitriones, en Madrid.

«No podemos obsesionarnos con Estados Unidos», pidió Gasol, consciente, sin embargo, de que el rival es más accesible que el ‘Dream Team’ olímpico y que todos esperan un cara a cara en la final. El posible enfrentamiento, alimentado por el recuerdo de las finales de Pekín y Londres, deja en un segundo plano lo demás: la renovación generacional de una Argentina sin Manu Ginóbili, la primera presencia de México en un Mundial en 40 años y la ausencia del francés Tony Parker.

Con la mira puesta en España y tras las numerosas deserciones, Krzyzewski se ha visto obligado a conformar un plantel joven (una media de 22 años), pero repleto de talento a pesar de las bajas.

El mando anotador del equipo será para James Harden y Stephen Curry, los bisoños DeMarcus Cousins, Andre Drummond, Anthony Davis, Kenneth Faried y Mason Plumlee buscarán frenar a los Gasol e Ibaka cerca del aro y el estado de Derrick Rose, que ha jugado apenas 10 partidos en las dos últimas temporadas de la NBA, es una auténtica incógnita.

España espera sacarse una espina que tiene clavada desde hace tiempo. El Mundial de baloncesto ofrece un doble premio para el anfitrión.