Los hechos ocurrieron «entre el martes o el miércoles» aunque los miembros de la formación política no tuvieron conocimiento de los destrozos hasta el viernes cuando fueron al inmueble y apreciaron las consecuencias del ataque, declaró Antonio Ortiz, coordinador del Consejo Local del partido.

Según ha detallado en el interior de la oficina encontraron hasta cinco adoquines de gran tamaño con los que había roto cristales, persianas y algún azulejo sin que por el momento hubieran cuantificado los daños que tendrán que ser peritas por los seguros. Los hechos fueron denunciados a la Policía Nacional el viernes y ayer efectivos de la Policía Científica inspeccionaron el lugar y se llevaron los adoquines para recaba huellas de los autores. Ortiz confía que con las cámaras de seguridad de los edificios cercanos puedan encontrarse a los culpables.

Este es el primer episodio de estas características que sufre el partido en Cuenca desde su fundación y no descartan que se trate de «actos vandálicos casuales» descartando que tengan ninguna motivación política contra su partido. «Sí es cierto que a pesar de que Cuenca es una ciudad muy tranquila el radicalismo se está acentuando por el hartazgo de la población contra la clase política», declara Ortiz.