Más de 200 personas han visto los restos del pendón original de Alfonso VIII tras su restauración durante los dos días que ha estado expuesto al público en el Ayuntamiento. 

El fragmento de la insignia militar del monarca ha sido recuperado por Luis Priego, profesor de la Escuela Superior de Restauración de Madrid y experto en la restauración del patrimonio diocesano y municipal, de forma gratuita.  Gracias al trabajo «minucioso» de restauración de Priego, se ha podido recuperar un trozo de seda de un metro de ancho por uno y medio de largo que da algunas pistas sobre las dimensiones reales del pendón (de 1,5 por 3 metros) y su color original (granate). Tras su exposición, la pieza vuelve a estar custodiada por el Cabildo.