Lleva prácticamente toda la era democrática como alcalde, casi 40 años, no sabe lo que es perder unas elecciones. Desde su Villarrubio natal, ha sido testigo del despegue industrial de una comarca en la que augura un descenso del paro en los próximos años. Desde el restaurante familiar El Vasco, que fundó su padre, y el Ayuntamiento, Antonio Flores espera den pronto con la fórmula para frenar la bajada de población en una provincia que considera ha evolucionado «de forma importantísima» en las últimas décadas. Si en 1996 en la localidad villarrubiera había 235 vecinos censados, casi doce años después, la cifra ronda los 150.

A sus 69 años, es uno de los políticos que más tiempo lleva como alcalde y confiesa que, si la salud se lo permite, le gustaría seguir otra legislatura más y que después alguno de sus hijos cogiera el testigo.

¿Lleva casi desde las primeras elecciones democráticas como alcalde? ¿Toda una vida dedicada al pueblo?

Sí, porque en el año 1979 en Villarrubio ganó UCD, también se presentó Alianza Popular y otra por independientes. Salió Francisco Martínez Alonso, él me hizo teniente alcalde y en el año 80 me dejó como alcalde por un problema de salud de su mujer. Fue un maestro para mí, porque me enseñó muy bien, a respetar a los vecinos, a no crear problemas, a ser lo más dialogante posible, le estoy muy agradecido la verdad. 

Cuando terminaba la legislatura, todos los años mi padre me mandaba a hablar con Francisco para ofrecerle el número uno de la candidatura, luego ya del Partido Popular, pero él decía que era más mayor y que estaba en buenas manos, que tenía que seguir yo. Así ha sido hasta las pasadas elecciones, siempre hemos sacado todos los concejales, antes siete y desde el 2000 son cinco.

 ¿Cómo ha sido el descenso de población en Villarrubio?

El pueblo ha llegado a tener más de 300 habitantes, pero la gente ha ido muriendo y marchándose fuera. Tarancón es un sitio clave que nos da mucha mano de obra y muchas cosas, pero nos quita población, porque la gente joven quiere tener todos los servicios posibles, guarderías, colegios, cafeterías, y eso no podemos tenerlo en Villarrubio. 

¿Cómo ha cambiado la gestión municipal desde que es alcalde?

No ha cambiado tanto, solamente en contabilidad y cosas de esas, antes teníamos secretaria, ahora una abogada también, y es todo más electrónico, pero no ha cambiado tanto. Estoy muy feliz de ser alcalde de Villarrubio, la gente ha respondido siempre al cien por cien, si hemos tenido algún problema lo hemos solucionado. He estado enfermo, tuve un infarto al corazón, y las muestras de cariño en el hospital no cesaban. Estoy muy muy agradecido.

¿Cómo valora el cambio de la provincia y la región en estos 40 años?

El cambio ha sido maravilloso, hemos hecho una comunidad autónoma que no teníamos antes en la dictadura. Tenemos una región donde se ha ayudado muchísimo a todos los pueblos, a los grandes y a los pequeños, hemos generado riqueza y bienestar a los vecinos. La evolución ha sido importantísima. 

¿Cómo ha vivido el despegue industrial de la comarca de Tarancón en las últimas décadas?

Hace cuarenta años éramos mucho más rurales, en Villarrubio solamente estaba El Vasco y un barecillo enfrente que le llamábamos el bar de Chibuso, donde la gente iba a echar la partida. No había ninguna empresa, hoy tiene tres o cuatro, Torbath con 160 empleados, otra con 50 trabajadores, dos áreas de servicio en el pueblo, el restaurante y un hostal.

La llegada de la autovía Madrid-Valencia parecía que iba a perjudicar muchísimo y ha generado una situación muy buena para las empresas, al estar cerca de Madrid, Cuenca y Valencia, y ahora Tarancón que puede ser un nudo industrial importante, eso va a beneficiar mucho al empleo, creo que el paro se va a reducir muchísimo de aquí a pocos años en esta comarca, por el crecimiento de empresas que va a tener la localidad de  Tarancón.

¿El Ayuntamiento está dispuesto a beneficiar a las empresas que quieran ubicarse en Villarrubio?

Estamos en contacto con CEOE-Cepyme y sí, cuando se observe movimiento de alguna haremos lo que tengamos que hacer. El Ayuntamiento estaría dispuesto a rebajar algún impuesto o incluso más, igual que cuando vino Baños de Castilla, que la parcela era municipal y se regaló para montar esa empresa; ellos a cambio pavimentaron la calle hasta la báscula, donde pagaron el coste de llevar el agua y el alcantarillado. 

¿Hay más puestos de trabajo que vecinos, le da miedo que Villarrubio pueda llegar a desaparecer?

Cuando inauguró José Bono las dos primeras grandes empresas nos dio 15 viviendas, el Ayuntamiento cedió el terreno, pero eso no ha llegado a cuajar. Hoy es una ruina lo que hay allí, no hay calderas en la calefacción, el cobre de las tuberías lo han robado... Hay que reconocer también que antes los pisos en Tarancón valían un dineral y hoy están a un precio más asequible. 

La población está envejecida, van muriendo, cada año va faltando muchísima gente, ahora estamos en unos 150. No creo que llegue a desaparecer, pero sí me da miedo que no se mantengan las raíces, eso va a ser más difícil, de aquí a ocho o diez años desaparecerán. Antes estaba la villarrubiera, el villarrubiero, los abuelos, que eran del pueblo, criaban a los hijos aquí, a los nietos, pero eso va desapareciendo, la gente se marcha a Madrid, Valencia, a otros pueblos más grandes, y si nos juntamos 300 es en agosto en las fiestas y nada más, luego se marchan. 

¿Qué se puede hacer para combatir la despoblación según usted?

Tienen que ayudar mucho a los matrimonios jóvenes. Todas las casas viejas que hay en los pueblos arreglarlas la Junta de Comunidades y darlas en alquileres de 150 euros al mes, y que personas mayores o jóvenes, cansados de las capitales o de la playa, podrían volver a los pueblos. Podrían volver los colegios, el médico, aunque aquí gracias a Dios tenemos consulta de lunes a viernes, con un gran doctor, Luciano Ramírez, y un ATS. Colegio no tenemos, va cambiando, la gente también va modernizándose y entonces el llevar al chico a las nueve a la carreterita, donde está la marquesina de la Junta, donde para el autobús, y luego los traen a las dos, a muchas padres y madres les viene bien que el colegio esté en Saelices y Tarancón mejor que en Villarrubio.

¿Villarrubio es conocido a nivel nacional gracias a Nino Bravo?

La trágica muerte de Nino Bravo en un accidente al pasar por aquí fue una desgracia, fue un gran cantante que murió joven, pero la verdad es que al pueblo pues... Hemos hecho todo lo posible por homenajearle, hay una cruz, una zona que hemos ajardinado y no le faltan flores nunca de sus fans, de sus seguidores, parece increíble. Hemos hecho varios homenajes,  una vez vinieron tres autocares del pueblo donde nació, donde está su museo, Ayelo de Malferit. Viene gente de todos los países, seguidores de Argentina, parece imposible. Ahora hemos presentado un proyecto a Adimmac, para que con fondos europeos podamos hacer una zona de recepción de visitantes, poner la imagen de Nino Bravo con las canciones y acondicionar un poco la entrada de Villarrubio con paseos y demás.

Está a punto de acabar el año, en Villarrubio lo despiden con la tradición de San Silvestre, que no es precisamente una carrera. 

Sí, San Silvestre es el 31 de diciembre, el último del año, pero nosotros viendo que la gente se quiere marchar de fiestas a otros lugares, lo celebramos en la víspera, el día 30. Hacemos una misa y después se besa la mano de San Silvestre, una reliquia en plata, se la llevamos a los enfermos y regalamos una cajita de pasteles, es algo tradicional aquí. Además, por la noche, a las nueve, hacemos unas gachas, dos o tres peroles, en la Casa de Cultura, con setas y espárragos, las hacen las mujeres, luego también unas ollas de chorizo, panceta, y a las once y media termina ese evento y llevamos una orquesta que está hasta las cuatro de la mañana, tiramos una pólvora y pasamos ahí la noche... Despedimos el año todos juntos, ya el 31 es la misa mayor, y cada uno lo celebra por su lado, en su casa o fuera.

Las fiestas fueron mucho tiempo referente en la comarca. ¿Cómo se las apañaba el alcalde para contratar a artistas de primer nivel?

He tenido la suerte de tener el restaurante El Vasco, que tiene un montón de clientes bastante importantes, eso lo he aprovechado tanto para las empresas como para hacer una venta de lotería y el beneficio lo pasábamos a las fiestas, entonces, la verdad es que sacábamos, tanto mi hermano José Luis como yo, que estábamos juntos en esto, muchísimo dinero, que se invertía en las fiestas patronales y hemos podido traer a Niña Pastori, Manolo Escobar, Mocedades, un montón de artistas de primera línea cuando en otros sitios realmente no se podía.

Ahora es más difícil porque esto se ha disparado y ya el restaurante un año lo lleva mi hermano y otro yo. Las fiestas casi las pagamos de la lotería que vendemos al año en El Vasco. Mi hermano lleva ahora la Hermandad de la Virgen del Villar, la patrona, y hace una lotería especial y todo lo que puede saca para contribuir con ese fin.

¿Se va a volver a presentar?

Estoy a disposición del Partido Popular. Tengo que decir que para mí ser alcalde, sí me ha quitado de estar con mi mujer, mis hijos, que junto con el amor a mis padres es lo más importante, pero para mí estar al frente del Ayuntamiento ha sido una alegría grandísima. Me costaría muchísimo dejar la Alcaldía, estoy a disposición del partido y luego está también la salud... Que  la Virgen del Villar me dé salud para poder estar estos cuatro últimos años ya, se lo debo a mi mujer y mis hijos, parece que no, pero da trabajo el Ayuntamiento, es tiempo y trabajo que hay que quitarlo de la familia. Y luego la remuneración económica es cero, mis concejales y yo no cobramos un duro del Ayuntamiento. Muchos te dicen, el que está al lado de la vaca se chupa la leche, no, nosotros no chupamos la leche, compramos, es más ponemos nuestro dinero para salir a Cuenca, Toledo, a Tarancón, a reuniones y todas las demás gestiones.

Algún disgusto que otro, alguna equivocación hemos podido tener, lo hemos hecho sin ninguna intención de perjudicarlos y les pedimos perdón. El único problema que hemos tenido ha sido de una edificación que ha solicitado la luz y está en el juzgado, los jueces decidirán.

¿Finalmente se pudo llevar la luz a  esas viviendas afectadas?

Finalmente no se llevó la luz, la cortó Iberdrola porque no pagaron, el Ayuntamiento metió la pata por darles luz mirando porque eran unas familias con niños, dimos del alumbrado público pero llegó el momento que no se pudo continuar así y se cortó. Estando Cospedal se llegó a hacer un proyecto, tendrían que haberse gastado 2.000 euros por chalet para llevar la luz, di permiso para dejar una columna en un terreno nuestro y un centro de transformación, pero no estuvieron de acuerdo y dicen que les hemos arruinado cuando no es así. 

¿Qué ha sido lo peor de ser alcalde tanto tiempo? ¿Y lo mejor?

Sacrificar la familia no porque se han adaptado, mi mujer ya se casó conmigo siendo alcalde. Lo mejor es que ahora tenemos un pueblo con un buen alcantarillado, agua que no nos falta nunca, tenemos una Casa de Cultura, y el cariño de la gente, eso es lo más importante. A mí me enseñaron una religión mis padres y yo lo practico, me enseñaron ser cazador y yo lo practico, me enseñaron jugar al mus y yo lo practico, pero eso no quiere decir que yo me busque enemigos en esa religión, esa religión lo más importante es que hay que enseñarla a las demás personas para que puedan convivir los unos con los otros. Porque vamos a ser enemigos de Tarancón, Almendros, Uclés, Tribaldos o de tal pueblo, hay que hacer comarca y ayudar a los demás cuando te piden que es para mejorar a los vecinos.

¿Qué opina de los nuevos partidos políticos que se están creando?

No entiendo, ahora veo una cantidad de crías que no veía antes, pequeñitas, de dos y tres años de edad, con la bandera de España, y veo a los padres y oyes que votaron antes al Partido Popular y ahora dicen que van a votar a Vox. Se ve que hay una corriente nueva que puede llevarse diez o quince diputados en las elecciones generales, en la comunidad autónoma y en las municipales va a ser muy difícil que Vox irrumpa.