Las malas sensaciones que dejó el envite ante el Ademar León quedan ya atrás tras aunar fuerzas y reflexionar durante toda la semana. A base de trabajo y compromiso, el Ciudad Encantada está dispuesto a lavar su imagen y poner fin a su crisis de resultados. En este sentido, recuperar la identidad y raza competitiva es fundamental para remontar el vuelo de inmediato.

 

«El examen de conciencia nos sirve para madurar», apunta Víctor Frade, sin reparos tras el último tropiezo en El Sargal: «No estuvimos a la altura pese a que conocíamos bien las virtudes del contrario».

La palabra reacción es la que más se repite en el vestuario. «El bloque tiene que estar en plena sintonía para que no se noten tanto los fallos individuales. Lo más positivo es que hay suficiente margen de mejora para cambiar la dinámica», explica el guerrero gallego.

 

Al igual que ocurrió en el inicio del último curso, el Globalcaja transmite dudas que obedecen, en parte, a su falta de acoplamiento. «No hay que ponernos nerviosos. Debemos estar tranquilos y competir hasta el final en cada choque». 

 

Los cometidos. La mejora ofensiva es el gran cometido del equipo de Lidio Jiménez, como asevera el pivote: «Tenemos que ganar fluidez en ataque, mover más rápido el balón y dejar la ansiedad a un lado. Fallamos muchos lanzamientos a puerta y nos falta efectividad». 

 

Sin demasiado protagonismo en las acciones ofensivas de los conquenses, Frade sólo piensa en el bien del colectivo: «Me da igual participar más o menos en la pista con tal de que el equipo haga goles y saque los partidos adelante».

 

Con la fe intacta. El renovado Villa de Aranda es la próxima amenaza (sábado, 20,30 horas) del Ciudad Encantada, capaz de imponer su dominio en sus tres últimas visitas ligueras al Príncipe de Asturias, todo un talismán.

 

«Es una cancha que se nos da muy bien. Trataremos de alargar esta buena racha, aunque su afición apretará mucho desde las gradas», sostiene Frade, que suma 10 goles y una efectividad del 71 por ciento en sus lanzamientos.

 

Los laterales Oswaldo Dos Santos, con un potente tiro exterior, y Juanlu Moyano, exjugador del Guadalajara, son dos de los baluartes ribereños, invictos en el campeonato. «Sabemos que están en un gran momento de forma y que saldrán a por todas en su pista después de comenzar tan enchufados. Estaremos preparados», apostilla.

 

Las múltiples armas de los amarillos, sin el brasileño Raúl Nantes, incentivan aún más al Globalcaja, consciente de la necesidad de dar un golpe de autoridad en tierras burgalesas: «Vamos a luchar a muerte cada balón para traernos la victoria». Otro desafío mayúsculo.