Emiliano García-Page se muestra optimista a la hora de poder abordar cierto debate sobre la financiación autonómica, «al menos parcialmente». El problema para el Gobierno es Cataluña: no se aborda la financiación porque Cataluña no quiere sentarse en la misma mesa. De forma que o se le impone el pacto de los demás, o se permite una relación bilateral con el Estado, «mucho peor». Pero si no se puede abordar el conjunto de la financiación, Castilla-La Mancha pedirá que se aborden cuestiones parciales para la dependencia y política sanitaria. Así se lo pedirá García-Page a Pedro Sánchez en su próximo encuentro. Entre tanto, el presidente reitera su compromiso con los objetivos de déficit, «pero nunca vamos a dejar de cumplir con los objetivos sociales». Y en tanto no llega la nueva financiación, el presidente reitera que no subirá los impuestos.