La película Entre dos aguas, dirigida por Isaki Lacuesta, fue ayer galardonada con la Concha de Oro de la 66 edición del Festival de San Sebastián, que entregó el presidente del jurado, el famoso director y guionista Alexander Payne, durante la gala de clausura, celebrada en el Kursaal de la capital guipuzcoana. 

El gerundense llevó a todo el equipo al escenario y quiso compartir con ellos este premio. Además de leer un mensaje de su actor Cheíto agradeciendo el premio, también dio paso a Israel, que, emocionado, ha celebrado el galardón. «Espero que los directores de este país le exploten -en el buen sentido- y no haya que esperar 12 años a otra película mía: es un actor maravilloso», añadió el cineasta. 

La cinta del director cuenta de nuevo con Isra y Cheíto -al igual que en su película de 2006 La leyenda del tiempo- como protagonistas, que ya han abandonado la adolescencia y afrontan problemas de la madurez. Sobre todo Isra, que acaba de salir de la cárcel -una de las partes de ficción de la cinta- y encuentra dificultades tanto para recuperar su vida familiar como el encontrar un trabajo estable.