Tolerancia cero, condena absoluta y rechazo enérgico. Ese fue el mensaje directo, alto y claro que lanzaron todas las instituciones al unísono con motivo de la celebración del Día Internacional contra la Violencia de Género. Los representantes de las principales administraciones públicas de la ciudad, la provincia y la región se sumaron a los actos organizados en colaboración con el Instituto de la Mujer y la Universidad de Castilla-La Mancha.
Después de la firma del convenio de colaboración entre el Ministerio de Sanidad, Asuntos Sociales e Igualdad y el Instituto de la Mujer que tuvo lugar por la mañana en el Archivo Provincial, la Subdelegación del Gobierno acogió por la tarde el acto central con la lectura de la Declaración Institucional del Gobierno de España. En dicho evento se dieron cita, entre muchos otros, el alcalde la ciudad, Ángel Mariscal; el presidente de la Diputación Provincial, Benjamín Prieto; el vicepresidente de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro; y el subdelegado del Gobierno en Cuenca, José Montalvo.
Asimismo, se proyectó un vídeo elaborado por Makingdos, un proyecto experimental de creación universitaria perteneciente a la UCLM. En éste, varios alumnos de diferentes titulaciones participaban en una tertulia que tenía por asunto central la violencia machista. Parte de estos alumnos también pintaron dos cuadros que adornaron y dieron colorido a la sala durante el acto.
Concentración pública. Inmediatamente después, todos los representantes de las instituciones, asociaciones, colectivos, así como algunos vecinos que asistieron a la ceremonia, se trasladaron a la céntrica Plaza de la Constitución para formar parte de la concentración que allí tuvo lugar. En un acto conducido con solvencia por la periodista Noelia Barroso, se contó con la participación directa de todos ellos. Y es que mientras el ensamble de saxofones de la Escuela Municipal de Música de Cuenca interpretaba de manera magistral Adagio del compositor estadounidense Samuel Barber, uno a uno se fueron leyendo los nombres de las 48 víctimas mortales como consecuencia de la violencia de género en lo que llevamos de año. De esta forma, por cada nombre, se depositó una vela y una flor hasta completar un bello mosaico de luz y color que sirvió como sincero y emotivo homenaje a todas estas mujeres que perdieron su vida debido a una de las lacras más lamentables que padece la sociedad actual.
Asimismo, como la propia presentadora del acto recordó, «aunque no se refleje en estas estadísticas, queremos hacer un especial recuerdo para Laura», caso que tan de cerca y sensiblemente ha afectado a Cuenca, tristemente. Y, al mismo tiempo, también para todas aquellas víctimas menores de edad. El acto concluyó con un minuto de silencio entre todos los presentes, que se rompió con la interpretación musical de La Pavane del compositor francés Gabriel Faure.