Aclara que la puerta de la muralla de Cañete era inaccesible

Redacción
-

El diputado de Cultura, Francisco Doménech, arremete contra los socialistas que "vuelven, una vez más, a recurrir a la mentira para intentar empañar la excelente labor de la Diputación en materia de recuperación del patrimonio"

El diputado provincial de Cultura, Francisco Javier Doménech, ha reprochado al PSOE de Cuenca que haya vuelto a recurrir a la mentira para intentar empañar la gestión del equipo de Gobierno de Benjamín Prieto al frente de la Diputación, en este caso, poniendo en entredicho la excelente labor de la institución provincial en materia de recuperación del patrimonio con la rehabilitación de la Puerta de las Eras del recinto amurallado de Cañete. Y es que, según ha subrayado, “no les ha temblado el pulso ni han tenido el mínimo remordimiento a la hora de asegurar que la Puerta de las Eras de Cañete ha sido siempre un espacio accesible y, ahora, tras las obras de rehabilitación, ha dejado de ser apta para personas con movilidad reducida, cuando la realidad es que esta puerta de la muralla de Cañete, y lo saben tanto los vecinos de la localidad como los visitantes, lleva siendo inaccesible para el público desde hace décadas, con una de sus entradas cerrada con un muro y una puerta de hierro (calle Isabel la Católica) y la otra incomunicada con la calle adyacente. Algo que, por cierto, ya no es así, gracias a la actuación de la Diputación, que ha permitido que los ciudadanos puedan cruzarla como una calle más del pueblo y no se vean obligados a dar un rodeo para ir de un lado a otro de la muralla como venía ocurriendo desde hace años”. Pero, por si esto fuera poco, el diputado de Cultura recuerda a los socialistas que la obra no ha concluido totalmente y está a falta de rematar algunos detalles con los que se solventarán estos pequeños inconvenientes, lo que, a su juicio, “no ha sido obstáculo para el PSOE, todo lo contrario, lo ha aprovechado para criticar las obras acometidas hablando, incluso, de chapuza, y echando por tierra el trabajo de muchos profesionales, incluidos los técnicos del Servicio de Patrimonio de la Junta de Comunidades, que dieron su visto bueno al proyecto”.