Derbi de hermanamiento

Héctor Madrigal
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San José Obrero y Conquense, unidos por su amor al fútbol y a la ciudad, miden su poderío en La Fuensanta en un duelo histórico y repleto de alicientes que hará vibrar a los aficionados

Histórico, emocionante, espectacular ... Los adjetivos se agotan para calificar el duelo que San José Obrero y Conquense disputan (12,15 horas) por primera vez en La Fuensanta. Un derbi de máxima rivalidad, pero también de hermanamiento, pues los dos clubes están unidos por su amor al fútbol y a la ciudad a la que representan.
 
Con un ambiente de lujo en las gradas, rojillos y blanquinegros medirán su fuerzas en un partido que, a priori, parece desigual. «La Balompédica es claramente favorita por presupuesto e historia y, además, jugamos en su estadio. Lo más lógico sería perder, pero competiremos. Queremos divertirnos en el campo», señala el míster obrerista Fran García.
 
Palabras que no comparte el técnico balompédico Manu Calleja, quien desmiente que su equipo parta en ventaja en el choque: «La presión es la misma para ambos, aunque los objetivos sean diferentes. Tenemos la obligación de ganar, como todas las semanas, pero el encuentro está al 50 por ciento».
 
Sin complejos de ningún tipo, el equipo de Las Quinientas afronta con optimismo el envite pese a las sensibles bajas de Toboso, Recuenco, Pinedo, Héctor Rubio, Semprún y Rober. «Las ausencias son importantes, pero no son ninguna excusa. En el terreno de juego, nadie es más que nadie y las diferencias se reducen», incide García justo antes de entrenar ayer en el césped natural del Luis Ocaña.
 
En esta línea, Calleja vaticina «una batalla muy complicada» y advierte del potencial que atesora el adversario: «Ellos saldrán a muerte y jugarán con mucha intensidad. Nos aguarda un rival que tiene ilusión y ganas y está unido. Su trabajo tiene un gran mérito».
 
Propuestas. Controlar la posesión y ganar profundidad en las acciones son dos de los retos de ambos contendientes, con la misma filosofía de juego. «Confío en estar finos con la pelota y combinar para plantarles cara», subraya Fran, quien recalca que «contamos con jugadores que no tienen nada que envidiar a los del Conquense».
 
El desafío del San José, como desvela su preparador, es «robar el balón, hacer nuestro fútbol y estar a la altura durante los 90 minutos» en La Fuensanta, cuyas dimensiones y superficie pueden ser un handicap para los rojillos.
 
«A nosotros también nos cuesta jugar en casa, como se ha visto tras las dos últimas derrotas. Por eso, no creo que la hierba sea un factor determinante», apunta el entrenador de Beranga, quien desvela los planes balompédicos: «Nuestra idea es la de llevar la iniciativa y estar acertados en la definición, que es en lo que estamos fallando últimamente».
 
Más solidez y pólvora. El Conquense, con la única baja de Alfonso, recupera a Iván Gil y Sendoa en su línea defensiva, así como al goleador Zapata. Más efectivos para desequilibrar y marcar la diferencia: «Esos regresos son un punto a favor porque disponemos de casi todos nuestros recursos».
 
En el bando obrerista, la vuelta de Butra, el pulmón en la medular, añade más mordiente a un bloque en el que Raúl también tendrá minutos tras superar sus molestias en el tobillo. «Ojalá podamos sumar nuestro primer triunfo. No hay que demostrar nada a nadie, salvo a nosotros mismos. Somos un equipo de Tercera que tiene cualidades suficientes», añade García, «sin miedo a una goleada». Un derbi para disfrutar del buen fútbol.