El héroe defensor de las mujeres

Agencias
-

Muere en Madrid a los 62 años Jesús Neira, el profesor que estuvo en coma por evitar la agresión a una fémina por su pareja en 2008

 
Jesús Neira, el periodista y profesor de la Universidad Camilo José Cela que ayudó a una mujer víctima de violencia de género en 2008, y por lo que fue atacado y estuvo en coma durante más de dos meses, falleció ayer en Madrid a los 62 años, según informaron fuentes de su entorno. 
El granadino sufría severos problemas de salud en los últimos períodos, que le llevaron a estar ingresado en varias ocasiones. Así, el pasado martes fue llevado al Hospital Puerta de Hierro, muriendo finalmente al mediodía. 
El 2 de agosto de 2008, Neira intentó ayudar a una mujer, Violeta Santander, que estaba siendo golpeada en Majadahonda por su pareja, Antonio Puerta, tras lo que fue atacado «con gran agresividad» por éste. Al día siguiente del asalto, Neira empezó a sentirse peor y acabó ingresando en un centro sanitario, donde fue intervenido a vida o muerte y acabando en un coma que duraría 66 días. 
«Tiene los pulmones encharcados de sangre, padece hipertensión e inflamado el cráneo. Además, él está operado de corazón y esta situación requiere anticoagulantes, pero son incompatibles con la hemorragia cerebral», detallaba entonces su mujer. 
Por su parte, Antonio Puerta fue condenado en noviembre de 2009 a siete meses y 15 días de prisión por los malos tratos que infligió aquel día a su pareja, y falleció tras ingerir drogas en octubre de 2010.
En enero de 2009, la entonces presidenta de la región madrileña, Esperanza Aguirre, le nombró presidente del Consejo asesor del Observatorio regional de Violencia de Género, después de haberle galardonado con la Medalla de Oro al Mérito Ciudadano de la Comunidad de Madrid por su intervención en la agresión. El Gobierno de España le concedió, además, la Gran Cruz del Mérito Civil. 
Posteriormente, fue destituido al cometer un delito de seguridad vial. Las autoridades le cogieron conduciendo en la M-40 de Madrid dando bandazos. Triplicaba la tasa de alcoholemia. Él argumentó que se debía a su medicación. Según los expertos, es posible.
Otra de las polémicas del profesor fueron sus declaraciones y comentarios. Así, tras conocer la puesta en libertad de su presunto agresor, indicó: «Me da asco y vergüenza, me gustaría ser ciudadano de otro país y lo haré». Meses después, publicó el libro España sin democracia, en el que atacaba el sistema parlamentario.