Defender los cotos intensivos de pesca, la trucha arco iris y las aguas en régimen privado. Son algunos de los objetivos que persigue la Asociación de Cotos Intensivos de Pesca de Castilla-La Mancha (ACIP), que se presentó ayer en la capital tras constituirse, formalmente, el pasado mes de agosto en la localidad conquense de Villalba de la Sierra.

 

La organización, que engloba tanto a las asociaciones de pescadores como a los piscicultores y a los propietarios de lagos privados, nace con la finalidad de consolidar los cotos y reivindicar el derecho de pesca en los mismos. 

 

«Tanto los estamentos ecológicos como las administraciones nos han hecho la vida imposible, por lo que decidimos constituirnos y defender lo que creemos que es justo. Nuestro reto es tener representación en los consejos provinciales y regionales, así como conseguir un representante en el consejo nacional de medio ambiente, donde partimos en desventaja con los ecologistas» explicó el presidente de la asociación, José Víctor Martínez.

 

En este sentido, el máximo representante de ACIP alertó de la proliferación del cormorán, una ave acuática que «no sólo está haciendo mucho daño a los intensivos de pesca, sino a los ríos y embalses de la región».

 

Por ello, José Víctor Martínez catalogó al cormorán, de origen nórdico, como «una especie invasora» al «provocar grandes pérdidas en la fauna piscícola» de las diferentes provincias de la comunidad: «Necesitamos regular su población de inmediato y dar una solución a este problema. Vamos a trasladar nuestras preocupaciones al delegado de Medio Ambiente para que actué lo antes posible».

 

Ayudas. Asimismo, los responsables de ACIP solicitaron una mayor implicación del Gobierno regional para poder hacer frente a los «numerosos gastos» que acarrea el mantenimiento de los intensivos. «Las administraciones no nos ayudan económicamente, como sí hacían antes. Necesitamos que nos echen una mano, al menos, en los servicios de transporte y guardería», aseveró el responsable de esta asociación.

 

Martínez también realzó la labor que desarrollan los miembros de su plataforma, que pretenden contribuir a la mejora del medioambiente fluvial: «Estos cotos intensivos son imprescindibles para prestar un buen servicio a los ciudadanos y quitar presión a otras especias autóctonas, como la trucha común, que es la que queremos preservar a toda costa».

 

Cuenca dispone, actualmente, de cuatro cotos intensivos, situados en el Chantre, el Puente Romano, La Torre y Badocañas (El Herrumblar). «La pesca es un sector vital en la provincia, con un peso muy importante de los intensivos. De hecho, contamos con unas 26.000 licencias, lo que refleja su gran incidencia», concluyó.