Los errores y el desacierto abren la herida del Ciudad Encantada en Gijón (24-21)

Héctor Madrigal
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Una nefasta primera parte del equipo de Lidio dio alas a los asturianos, que conservaron su ventaja tras el paso por los vestuarios y mantuvieron la cabeza fría en los momentos críticos • Los conquenses siguen a dos puntos del descenso

El Ciudad Encantada volvió a cometer gran parte de los pecados que le condenaron ante el Villa de Aranda y apenas pudo oponer resistencia ante un bravo Juanfersa Gijón que rentabilizó los errores y el desacierto de su oponente. El equipo local acrecentó las dudas de los conquenses, que pagaron caro su mala primera parte y se quedaron sin gasolina cuando buscaron la heroica.
 
Los nervios y las imprecisiones marcaron el inicio de la batalla. El meta serbio Pejcinovic se convirtió en el gran protagonista al frenar las acometidas de un Globalcaja que asestó el primer golpe a su oponente por medio de ‘Tibu’ Valles.
 
El exceso de adrenalina le pasó factura a los de Cuenca, que  perdonaron un claro mano a mano de Frade con el portero. Renaud también erró un siete metros y dio vida a los rojillos. Potic, ya en el minuto siete, y una contra de Pellitero cambiaron el decorado (2-1).
 
El conjunto de Lidio Jiménez buscó soluciones en ataque. Ahí encontró a ‘Tibu’ para nivelar la contienda y aliviar la ansiedad de sus compañeros. En pleno intercambio de golpes, Sau y Sergio López contuvieron el despertar de los asturianos (5-5), en clara línea ascendente.
 
Los hombres de Alberto Suárez pisaron el acelerador y ajustaron su defensa para sellar un parcial de 3-0. La irrupción de Pellitero, Plaza y Paredes dejó herido al cuadro castellano-manchego, desconocido y sin efectividad en ataque. Ni las exclusiones de Potic y Rial sirvieron para enderezar el rumbo, que se torció más con dos tantos de siete metros de Montoya y Paraja (10-5). El  letargo visitante duró 12 minutos, hasta que apareció Sergio López (10-6) a tres minutos del descanso.
 
Antes de encarar el túnel de vestuarios, Valles redujo la diferencia con su tercera diana (10-7), aunque los jovellanistas, bien  respaldados por Pejcinovic, mantuvieron la renta al término del primer acto (11-8).
 
Reacción. La arenga de Lidio a sus pupilos le sentó muy bien al Ciudad Encantada en el comienzo del segundo acto. Paraja abrió la brecha (12-8), pero los conquenses replicaron por medio de Balaguer y un gran Sergio López (12-11). Sin descomponerse, el Juanfera volvió a sacar pecho con Paredes y Paraja como estiletes (15-11). En un instante crítico, ‘Tibu’ tiró de galones (16-13), aunque Serdio aprovechó la segunda exclusión de Renaud para evitar la remontada (17-13).
 
Precisamente, el lateral galo, con dos goles, y Sergio López mostraron el camino de la esperanza (20-17). No obstante, una nueva diana de Rial obligó a los visitantes a pedir tiempo muerto.
 
Con Balaguer lesionado en la muñeca, el Globalcaja peleó por la machada y tiró de garra. Así, los canteranos Sergio López y Moya metieron el miedo en el cuerpo al Gijón (23-21). Un pasivo y un lanzamiento al palo de Sau frustraron a los de Cuenca, sin fortuna ni frescura en la recta final. La mejoría tendrá que esperar al derbi regional.
 
Lidio: «No dimos la talla ni supimos jugar con la presión»
El entrenador del Ciudad Encantada, Lidio Jiménez, lamentó la derrota cosechada en Gijón, que achacó, fundamentalmente a los nervios y a la necesidad de puntuar. «Empezamos muy bien en defensa, pero el equipo estuvo atenazado y falló muchos tiros claros. La verdad es que no dimos la talla ni supimos jugar con la presión», aseveró.
 
La fortuna tampoco acompañó a los conquenses, que perdieron a Balaguer en la recta final y se estrellaron hasta en 12 ocasiones con los postes. «No estamos teniendo suerte y, además, lanzamos con el brazo encogido por culpa de la ansiedad. Los fallos han condicionado al encuentro. Esto sólo se soluciona ganando el sábado al Guadalajara»