La Diputación recupera una obra de arte del siglo XVII

Redacción
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El presidente de la Diputación, que visitó el Centro de Conservación y Restauración de Bienes Culturales, se interesó por los trabajos de recuperación de un cuadro de la infancia de Jesucristo de Buenache de Alarcón

El presidente de la Diputación de Cuenca, Benjamín Prieto, se ha desplazado esta semana al Centro de Conservación y Restauración de Bienes Culturales y ha tenido la oportunidad de comprobar en persona el buen desarrollo de los trabajos de recuperación del cuadro de la infancia de Jesús, procedente de la iglesia parroquial de Buenache de Alarcón.  Una obra pictórica del siglo XVII de gran calidad artística y con una iconografía compleja que, tal y como ha resaltado Prieto, es un nuevo reto para los profesionales de este centro de la Diputación, que ya están trabajando en devolverle su esplendor de antaño. Algo que, una vez concluido, vendrá, a su juicio, a engrandecer y dignificar más aún, si cabe, tanto la iglesia parroquial de Buenache de Alarcón, en la que la Diputación ya actuó hace unos años en su rehabilitación, como, por supuesto, en la historia de la localidad. Y es que para Prieto con este tipo de intervenciones no solo se refuerza la identidad de nuestros pueblos, sino que, además, se incrementa su atractivo como destinos para el turismo cultural. Este cuadro de la infancia de Jesús llegaba al Centro de Conservación y Restauración de Bienes Culturales a finales del pasado mes de agosto presentando algunas pérdidas en la capa de pintura, que se encuentra muy craquelada, además de la oxidación del barniz, el oscurecimiento de la obra y los depósitos de suciedad superficial. Los trabajadores del centro le han informado al presidente de la Diputación sobre los pasos dados hasta ahora para la recuperación de este lienzo de 2,81 de alto y 1,38 de ancho, que han consistido en la realización de los estudios previos —fotografiado y estudio con radiación UV—, el desmontaje del lienzo del marco y el bastidor, la elaboración de un bastidor nuevo, la desinfección del marco original introduciéndolo en una cámara de anoxia,  la limpieza de la trasera del lienzo y la colocación de bandas perimetrales de lienzo para volver a tensar la obra. Asimismo, y ante el grave problema de levantamiento de la policromía, se ha protegido el lienzo con papel japonés con el fin de acometer el sentado de la policromía y ya se ha acometido su retirada, centrándose actualmente las labores en la realización de las pruebas de solubilidad para elegir el método más adecuado para la retirada del barniz antiguo, totalmente oxidado, y la suciedad depositada en la superficie. Paso que posteriormente llevará consigo la restitución de las pérdidas de pintura con técnicas de estucado y reintegración y el correspondiente barnizado de consolidación.