Desamor en el Lejano Oeste

JIMENA ANTONIELLO
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La película 'Mil maneras de morder el polvo' es el gran estreno de la semana

Desamor en el Lejano Oeste

Con un comienzo bastante divertido, el director Seth MacFarlane (Padre de Familia, etc.) nos sitúa en una historia curiosamente original, aunque no desternillante como se esperaba. Elegido el Lejano Oeste como escenario para que el personaje del granjero Albert (interpretado por el propio director) de rienda suelta a sus monólogos graciosos, la trama es por demás sencilla: una novia creída que deja al prota por cobardica al huir de un duelo, cambiándole por otro con más dinero, aunque no mejor persona. Y luego lo de siempre, la intención de regresar y la moraleja de que no todo lo que reluce es oro, supuestamente.

Es una comedia, es algo divertida, pero no logra su cometido. El problema es sencillo, demasiado escatológica y con un humor por demás explícito que a la tercera vez ya termina siendo vulgar y hasta obsceno. Diálogos con un lenguaje tremendamente moderno hecho adrede, que desentona con el período en que está ambientada la historia, la película recuerda a un Resacón, muy mal logrado. El exagerado intento por ser gracioso es lo que cansa, porque realmente no ocurre gran cosa.
Eso sí, tiene varios méritos como los extraordinarios cameos de personajes que cualquier espectador reconoce y admira, como puede ser un “Doc” de Regreso al Futuro.  Ahí sí, carcajada asegurada por la ocurrencia.

Fotografía cuidada y típicamente far west, un reparto que llama la atención del público meramente como gancho comercial (Charlize Theron, Liam Neeson, Amanda Seyfried, entre otros) y una historia sencilla y sin rumbo, repleta de comedia al estilo mas… ¿bestia?. Lo llamativo de la película radica en un entorno “cowboy” para burlarse de todo, porque no queda ni un solo tema del que no hacer broma.
Para pasar un momento distendido podría funcionar, dependiendo del público. Aunque permanece un saborcillo en la boca similar a “demasiado de esto o aquello…”. Es una parodia superficial con una producción de lujo.