No está del todo claro que Cospedal se vaya a salvar de la declaración de ‘persona non grata’, tal y como pide Podemos. El día que se supo la propuesta de la formación morada, ayer, el presidente de la Junta, Emiliano García-Page, avisó de que no lo apoyaría por razones morales. Pero hoy desde el PSOE no descartaban reconsiderar su negativa.

Lo hizo el diputado socialista Miguel González Caballero, que explicó que el detonante fue la rueda de prensa que dio antes que él la portavoz del PP, Claudia Alonso. «Lo único que ha hecho es insultar a Page», clamó. Y es que a los socialistas no les ha gustado ese tono contra el presidente de la Junta justamente un día después de que se posicionara en contra de declarar ‘non grata’ a Cospedal.

«Es algo inaudito que la portavoz del PP insulte a un presidente que ha puesto mesura», recalcó, «o el PPrectifica de sus insultos o se merece que este grupo reconsidere la iniciativa de Podemos». González señaló que Alonso «ha metido la pata» y que «se ha pasado de frenada».

En opinión del diputado del PSOE, las «declaraciones duras» de la portavoz del PPmuestran que con su nuevo presidente, Francisco Núñez, este partido «sigue echado al monte». Insiste en que lo que tendrían que hacer los populares no es dedicarse a insultar, sino dar explicaciones sobre si presuntamente se espió a dirigentes socialistas de la región, como Barreda o Page.

Además González ironizó con el hecho de que desde el PP estén  escondiendo a Cospedal. «Ya ni la nombran», señaló incidiendo en que ahora la mencionan como «exministra» o «aquella persona». El diputado del PSOE insistió en que la que fue hasta hace unas semanas la presidenta del PP de Castilla-La Mancha «ha pasado a ser la innombrable».

Molina, Venezuela e Irán. Claudia Alonso comenzó la rueda de prensa de la polémica dirigiendo sus ‘dardos’ a Podemos, a quienes acusó de traer propuestas «más propias de regímenes antidemocráticos, como Venezuela o Irán, que de democracias avanzadas. La verdad, va mucho con ellos», aseguró.

Posteriormente dirigió la mirada hacia el presidente de la región, a quien reclamó que nombre persona ‘non grata’ al vicepresidente segundo del Ejecutivo, José García Molina, también secretario regional de la formación morada. Éste se reunió en septiembre de 2017 -siendo ya miembro del Consejo de Gobierno- con el entonces vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras.

Esta cita a dos es suficiente motivo para el PP para «cesar» a García Molina de su cargo como vicepresidente segundo. «Si yo fuera Page sabría perfectamente lo que tendría que hacer», añadió Alonso, que tachó a Page de «cínico» por mantener en su gobierno a una persona «que quiere que se haga en Castilla-La Mancha lo mismo que se está haciendo en Venezuela».

Podemos ya la ha registrado. María Díaz confirmó que la iniciativa parlamentaria presentada para declarar «a María Dolores Cospedal persona non grata en la región» por el secretario regional de la formación «está ya registrada» según marca la norma autonómica, por lo que dijo esperar que esta propuesta pueda «debatirse en el próximo Pleno de las Cortes».

Preguntada por el desacuerdo declarado por los socialistas ante la cuestión, la secretaria de Organización de Podemos Castilla-La Mancha consideró que «nadie entendería que el Partido Socialista no apoyara la propuesta o  no permitiera el debate en las Cortes».

En este punto, reafirmó la importancia de esta iniciativa asegurando que «es de sentido común porque todos sabemos cómo dejó esta comunidad autónoma» y apreciando que es indudable que «lo que ha ocurrido afecta a la imagen y la honradez de esta tierra».

Y puesto que, a su juicio, declarar a Cospedal persona non grata en Castilla-La Mancha es «un clamor social», anunció que han sido «muchos los ayuntamientos que nos han solicitado información sobre la propuesta para poder sumarse». De ahí que insistiera en la necesidad de conseguir que la que fuera presidente regional «sea persona non grata no sólo de hecho sino también de derecho».

Sobre la posibilidad de que no pueda debatirse por problemas de procedimiento, María Díaz apreció que «si no se puede concebir que el PSOE no apoye la propuesta, menos entenderíamos que no permita este debate en las Cortes regionales». De hecho, defendió esta iniciativa porque «busca que todos los partidos se posicionen ante una situación muy grave», por lo que «si se escudan en el formato sería una mala noticia» ya que desde Podemos «vamos a buscar todas las vías para que se pueda debatir».