Marcos Fernández Berlanga es desde hace unos meses el nuevo director de la Escuela Politécnica del campus. Procedente del equipo anterior y rodeado de un equipo con experiencia en direcciones, Fernández se ha marcado como objetivos para los próximos cuatro años, por un lado, mantener lo que ya se venía haciendo, empezando por retomar el proyecto ‘pre campus’ entre los centros de Secundaria y por otro, lanzar nuevas iniciativas formativas, nuevos másteres, así como inundar las redes sociales con lo que hay detrás de la Politécnica y de las ingenierías que en ella se dan.

Usted ya estuvo en el equipo anterior de dirección como jefe de estudios de Telecomunicaciones y ahora es el nuevo director de la Politécnica ¿Cómo da este paso?

El director que había no podía seguir por cuestiones personales y yo simplemente tomé la decisión de darle el relevo, de dar continuidad a todo lo que ya habíamos empezado y de paso lanzar nuevas ideas. La verdad es que fue algo bastante natural.

¿El equipo que le acompaña también procede como usted de la etapa anterior o son nuevos?

Hay mezcla. Me acompaña uno de los subdirectores que estaban con nosotros en el anterior equipo, José Antonio Ballesteros, mientras que el resto del equipo es nuevo pero todos han tenido experiencias de direcciones ya sea en comisiones o en otros equipos directivos como Samuel Quintana o María Segarra. Por último, está Raquel Martínez, la cual, aunque no ha estado en ningún equipo directivo, en la anterior legislatura era la coordinadora y la responsable de la consiguiente comisión de movilidad.

Ha comentado que uno de los motivos que le movió para ser el nuevo director fue dar continuidad a lo que ya se estaba haciendo ¿ A qué se refiere?

Me refiero, por un lado, al proyecto de ‘pre campus’ que veníamos haciendo en los centros de Secundaria, que ha estado parado por la pandemia pero que va a continuar porque este proyecto ha sido toda una punta de lanza para conocer las titulaciones de esta Escuela. Y, por otro, a los cursos de formación complementaria durante la vida profesional y de actualización que hacíamos y hacemos. Precisamente ahora estamos lanzando un nuevo máster propio de la universidad relacionado con el mundo del desarrollo y la interacción de procesos en ‘sat’, un software que está implantado en la mayor parte de las empresas importantes y grandes para su gestión. La fase de inscripción ya está abierta con sólo 24 plazas, es completamente on-line y el perfil de ese máster es único en el país . Luego está el apoyo a nuestros profesores que están investigando, algunos de los cuales son muy punteros y están en grupos muy bien posicionados.

Y lo nuevo, ¿por donde va a ir?

Al margen del máster mencionado, vamos a lanzar otras iniciativas formativas. Se ha mandado a la ANECA un máster universitario relacionado con la prevención de riesgos laborales y en el que esta Escuela es copartícipe junto con otras de la región y se está diseñando un máster interuniversitario relacionado con la economía circular en la construcción y, aunque se está en negociación con otras universidades, desde el rectorado ya nos han autorizado para que nuestra Escuela sea líder de ese proyecto. También tenemos como novedad nuestra inundación en las redes sociales con una apuesta muy fuerte de promoción y difusión de nuestro mensaje y actividad, a fin de acercarnos a nuestro público futuro, a nuestros estudiantes y se nos conozca. Hay mucha gente en la ciudad y en la comunidad que no sabe que en Cuenca se da edificación y telecomunicaciones. Igualmente, en cuanto se puedan hacer actos, vamos a retomar el 25 aniversario de la Escuela y conmemorar, algo que no pudo ser por el Covid.

Dos de los estudios de Grado del campus en los que se ha abierto la matrícula directa se dan en la Politécnica ¿qué pasa con los ingenieros hoy en día?

Recuerdo que cuando yo inicié mis estudios todo el mundo quería ser ingeniero y no había plazas suficientes. Ahora mismo lo que hay es muchísima más ofertas de empleo de cualquier ingeniería que ingenieros para cubrirlas. Las estimaciones hablan de que hacen faltan miles de ingenieros al cabo de año y que las universidades no somos capaces de sacarlos simplemente porque no llegamos a cubrir la plazas que tenemos. Y esto no sólo pasa en la UCLM.

Los estudiantes no eligen ser ingenieros porque tiene fama de que es una carrera difícil y de que hay que ser un cabeza cuadrada para estudiarla, pero no es cierto. Hay que quitar el miedo a ser ingeniero. Cualquier persona con un buen bachillerato tecnológico es capaz de sacar una ingeniería sin el más mínimo problema.

No obstante, en opinión del director de la Politécnica ¿qué tiene de atractivo la ingeniería? ¿Cuál de las dos tiene más aceptación?

En primer lugar, el pleno empleo, el mercado los absorbe y acaban quedándose allí donde han hecho sus prácticas externas. Nuestros estudiantes de telecomunicaciones en cuarto curso ya están trabajando. Pero en edificación pasa lo mismo y todos los que salen, salen con trabajo, además de que ha habido un cambio radical del modelo de trabajo en esa profesión.

Antes, lo tradicional era que el arquitecto técnico o el ingeniero de edificación estuviese a pie de obra vigilando cómo se estaba desarrollando. Ahora, estamos ante una profesión totalmente tecnificada. Más de uno piensa que cómo no hay grúas por las calles, cómo no hay obras, no hay trabajo para los ingenieros de edificación, pero esto es un concepto totalmente erróneo. Precisamente ayer por la tarde tuvimos una jornada on-line, que llevaba por título, Edifica futuro, y en la que se vieron las distintas y últimas ramificaciones de esta profesión.

Al futuro estudiante, no obstante, lo que más le llama la atención es la parte de telecomunicaciones, en donde ofertamos 40 plazas frente a las 20 de edificación. Nosotros ofrecemos calidad en la formación y un trato muy cercano. Somos una escuela pequeña pero queremos serlo porque nosotros formamos a personas no a números.