El TSJ cifra en 1.147 las muertes sospechosas no confirmadas

Redacción
-

Según las las licencias de enterramiento expedidas por los registros civiles, el TSJ tasa en 1.921 muertes las firmadas con sospechas de coronavirus en marzo, 1.147 más que las registradas por Sanidad. La cifra de muertos se multiplicaría por 2,5

El TSJ cifra en 1.147 las muertes sospechosas no confirmadas - Foto: Miguel Ángel Valdivielso

El Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha informaba el lunes de las licencias de enterramiento expedidas por los registros civiles de la región con motivo de la situación originada por la pandemia del COVID-19, tasando en 1.921 la suma de las muertes confirmadas y las sospechosas de haberse producido por coronavirus durante el mes de marzo con, una cifra superior a los 774 fallecidos oficiales registrados por la estadística oficial ofrecida al cierre del tercer mes del año. De confirmarse las muertes sospechosas, la estadística oficial de defunciones se multiplicaría por 2,5.

En un comunicado, el TSJCM explica que estas actuaciones de conteo se inician a raíz de las informaciones solicitadas para garantizar el correcto funcionamiento de los registros civiles, en las que se apreciaba un desproporcionado incremento del número de licencias de enterramiento y defunciones con las consiguientes dificultades en la gestión de los trámites para la inhumación de los cuerpos.

De igual modo, se pusieron de manifiesto, desde un primer momento, dificultades para la gestión de las licencias e inscripciones de defunción por aumento significativo de la mortalidad, así como en la consignación de las causas de la muerte en las certificaciones médicas, en las que no siempre aparecía referenciada la infección por el virus.

Todo ello debido fundamentalmente al no sometimiento a muchas de las personas afectadas a test o analíticas que acreditaran cumplidamente dicho contagio, si bien en muchos supuestos los indicios y síntomas de las patologías inmediatamente causantes de la muerte apuntaban a dicha infección como causa principal o determinante de la misma.

Por provincias

Por provincias, en Albacete se han expedido 786 licencias, 324 para sospechosos de estar contagiados, mientras que la cifra oficial a 31 de marzo se situaba en 156; y en Ciudad Real se han licenciado 1.163 entierros, 852 de sospechosos, frente a una estadística oficial de 245.

En el caso de Cuenca, hasta 308 personas han sido enterradas, 185 con posibilidad de estar afectadas por COVID-19; ante una cifra que el Sanidad colocaba en solo 68; y en Guadalajara hasta 222 fallecidos enterrados eran sospechosos de coronavirus de entre los 337 enterrados, pese a que Sanidad calculaba 100 a 31 de marzo.

Por último, la Consejería de Sanidad difundía que 205 toledanos habían fallecido en el mes de marzo debido al coronavirus, pero de las 725 licencias de enterramiento expedidas, 338 eran casos sospechosos.

Con estos datos, el 41,2% de los fallecidos en Albacete durante el mes de marzo presentaban síntomas compatibles con el COVID-19; tasa que se va al 73,3% en Ciudad Real; al 60,1% en Cuenca; al 65,9% en Guadalajara; y al 46,6% en Toledo.

Del mismo modo, Albacete y Ciudad Real son las provincias que más incremento de enterramientos ha experimentado en el tercer mes del año, con repuntes cercanos al 147% en ambos casos.

En Cuenca, por su parte, han sido enterradas casi un 48,8% más de personas que el pasado año; en Guadalajara un 92,6%; y en Toledo un 39,2% más.

Atendiendo solo a las capitales de provincia, Toledo ha sido la más castigada, ya que el incremento de enterramientos se ha colocado en un 627%; seguida de Guadalajara (+427%); Albacete (+419%); Ciudad Real (+360%); y Cuenca (+315%).

Todas estas circunstancias llevaron a la Presidencia del Tribunal Superior de Justicia a solicitar información a los jueces encargados de los Registros Civiles de Castilla-La Mancha sobre las licencias de enterramiento expedidas.

Las defunciones en marzo crecen un 96,3%

Los datos recibidos ponen de manifiesto que las defunciones en Castilla-La Mancha en marzo de 2020 se han incrementado un 96,3% con respecto a las ocurridas en el mismo periodo del año anterior.

En concreto, los registros civiles de Castilla-La Mancha han expedido el pasado mes de marzo 3.319 licencias de enterramiento cuando en marzo de 2019 se registraron 1.691 defunciones.

Y de ese número de 3.319, en 1.921 licencias de enterramiento, el 57,9%, se recoge como causa del fallecimiento COVID-19 o sospecha compatible, referenciando como sospecha aquellos supuestos en los que se recoge dicha probabilidad o sospecha en la certificación médica o existen motivos para ello por concurrir procesos patológicos de tipo pulmonar compatibles con dicha causa.

Como consecuencia de estos datos, se ha dictado Acuerdo por la Presidencia del Alto Tribunal dirigiendo prevención a los Jueces Encargados de los Registros Civiles para que, en lo sucesivo, se vele por que se haga una identificación lo más precisa posible de la causa inicial o fundamental de la muerte en todos aquellos casos en los que aparezcan procesos patológicos o causas o intermedias que puedan considerarse compatibles o sospechosos con el coronavirus.

En el expediente gubernativo abierto por la presidencia del TSJCLM se encomienda a los Institutos de Medicina Legal de Albacete, Cuenca y Guadalajara, y de Ciudad Real y Toledo, y a los médicos forenses, la colaboración necesaria con los registros civiles para que pueda quedar constatada la causa inicial o fundamental del fallecimiento en los supuestos de las defunciones ya inscritas desde el día 1 de marzo de 2020 en los que aparecieran sospechas o factores racionales de probabilidad de COVID-19.

Se ha acordado trasladar este Acuerdo al Consejo General del Poder Judicial y al Ministerio de Justicia a través de la Dirección General de Seguridad Jurídica y Fe Pública. El TSJCM resalta igualmente la función que están realizando los jueces encargados de los Registros Civiles y los funcionarios y personal a su servicio, así como la de los Juzgados de guardia que ejercen como Registros fuera del horario de los mismos, muchas veces sin medios de protección individual.