Manos Unidas ha recuperado esta semana la tradicional chocolatada en el instituto taranconero La Hontanilla, que tuvo lugar el martes por la mañana con la presencia de la delegada de esta ONG en la provincia, Encarnita Pérez, y la representante de esta asociación en Tarancón, Laura Victoria Fernández.
Con la colaboración especial del departamento de Religión del centro educativo, la convivencia intergeneracional tuvo como objetivo sensibilizar a los alumnos con lemas como el de la campaña contra el hambre de Manos Unidas de este año, Nuestra indiferencia los condena al olvido. «Muchas gracias a toda esta comunidad educativa un año más por la entrega y acogida, y al grupo de personas mayores que desinteresadamente se acercaron para ayudarnos», subraya Fernández, que también agradece la colaboración de las empresas locales, Travel Brand, El Goloso, Bollería Máxima, Dulces Navarro, El Obispo, Chapela y restaurante Toscana Tarancón. Manos Unidas en la provincia destaca que este acto supone un paso más en el camino de sensibilización entre los jóvenes, ya que más de un tercio de la humanidad pasa hambre y la desigualdad crece día a día en estos momentos tan conflictivos.

También hace algunos días se llevó a cabo en el colegio Melchor Cano el bocata solidaria, que igualmente se recuperaba después del parón motivado por la pandemia de la Covid-19. Además de las colectas en los centros litúrgicos coincidiendo con la edición número 63 de la campañana internacional contra el hambre. 

La recaudación que se consiga desde Tarancón irá destinada a un proyecto de seguridad alimentaria e hídrica para pueblos indígenas del Bajo Chaco de Paraguay, que beneficiará de manera directa a 300 personas, e indirectamente a 500.