Victoria trabaja como médico de Atención primaria en un centro de salud de Toledo. No es adivina, pero desde hace tiempo barruntaba lo que se les venía encima. «Cuando nos aplaudían yo sabía que esto, tarde o temprano, iba a pasar. Estamos pagando su frustración y su agresividad y, aunque no se puede generalizar ni tampoco debemos personalizar, porque cada uno es responsable de sus actos; lo cierto es que nos han dejado solos a los pies de los caballos», razona tras ver cómo han pasado de héroes a villanos en unos meses.

«Yo entiendo el cabreo de la gente, pero deben saber que nosotros no damos más de sí», señala esta profesional con cerca de 2.000 pacientes inscritos a su consulta que ha tenido que sufrir insultos y amenazas en los últimos meses. «Hemos pedido un guardia de seguridad y nada. Hay veces que terminas tu turno y vas con miedo al coche», explica sobre la situación a la que están llegando. «La verdad es que la agresividad de alguna gente siempre ha estado ahí, y que hay centros de salud con más problemas de este tipo que otros, pero si dejas incendiar todo y desesperas a la gente es más fácil que situaciones como estas pasen», afirma Victoria, que recuerda que a comienzos de mes una médico y una enfermera a punto estuvieron de ser alcanzadas por una piedra de grandes dimensiones que lanzaron desde la calle a una ventana del centro de salud del Polígono.

Además, Victoria señala que con la implantación de las teleconsultas la agresividad de los pacientes se ha disparado. «Parece que te pierden más al respeto por teléfono, te insultan y al final te crees que no vales para nada. Te van minando poco a poco», se sincera una mujer que, como le pasa a muchos de sus compañeros, considera que los culpables están en los puestos de responsabilidad. «Los jefes han dado la callada por respuesta. Ya no es que no lo han visto venir, es que tenemos sensación de desamparo y, además, los protocolos cambian casi todos los días y al final lo que hacen es desacreditarte ante el paciente. Cómo esperas que alguien te tome en serio si un día dices una cosa y al rato la contraria», critica una profesional que considera que, en Atención Primaria, como ocurre en el Virgen de la Salud, se tendría que hacer una separación entre los pacientes de covid y el resto de patologías.