La Junta de Castilla-La Mancha ha valorado el compromiso del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo de impulsar una segunda convocatoria de los Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica (Perte) del Vehículo Eléctrico y Conectado (VEC), que mejora los requisitos de la primera edición y flexibiliza sus plazos y garantías.

Se ha congratulado, igualmente, de la nueva línea de ayudas para apoyar proyectos individuales de empresas del sector, según subrayó la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, durante su participación en la reunión de la Alianza del Perte VEC, celebrada este lunes y en la que participó de forma telemática.

En reunión que presidió la ministra del ramo, Reyes Maroto, la consejera valoró el compromiso del Ejecutivo central de iniciar una segunda convocatoria del PERTE VEC dirigida a incentivar proyectos que permitan la creación de un ecosistema para el desarrollo y fabricación de vehículos eléctricos y conectados a la red y convertir a España en el 'hub' europeo de electromovilidad, informó la Junta.

De cara a esta segunda convocatoria, el Gobierno nacional prevé la inversión pública de 4.300 millones de euros en el periodo 2021-2023 para apalancar 19.700 millones de euros de inversión privada.

Franco destacó que se flexibilicen los criterios de la convocatoria, puso en valor también que se amplíen los plazos de convocatoria para su ejecución y para ampliar el impacto de las ayudas, y la disposición del Gobierno central de impulsar una convocatoria de ayudas a proyectos individuales por medio de un sistema de concurrencia simple.

Se trata, incidió, de una convocatoria que ayuda a las empresas de la cadena de valor a acceder a la inversión pública destinada al impulso del vehículo eléctrico y conectado más allá de su participación en los proyectos agrupados de las dos grandes convocatorias, la ya resuelta de manera definitiva y la que prepara el ministerio.

Destacó la importancia de reforzar los puntos de recarga en el mapa nacional para garantizar el despliegue del vehículo eléctrico y conectado, además de apostar por impulsar la formación y cualificación de trabajadores en los perfiles que el desarrollo de la industria va a demandar para dar cobertura a la transformación de la industria.

La consejera subrayó como determinantes estos factores «para consolidar la ambición española como parte fundamental del 'hub' europeo de electromovilidad».