Dura carta y sin pelos en la lengua la que hacía llegar el doctor Pascual González Masegosa a la atención del director gerente del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete, Ibrahim Hernández, y que ha trascendido a la opinión pública sin que el remitente hubiera autorizado su divulgación. Al igual que ha ocurrido con otros vídeos y declaraciones de profesionales sanitarios que estos días se han hecho virales en las redes sociales, la carta personal que González Masegosa envió a Hernández, también lo consiguió en horas.
En su escrito, Pascual González Masegosa empieza diciendo que su ética profesional y su compromiso con la gran cantidad de sanitarios que están dando su esfuerzo y su salud ante la situación creada por el coronavirus, «por cierto mal gestionada», le impide dirigirse a Hernández con los términos de «estimado o querido compañero». El cirujano general ya jubilado de la Sanidad pública, pero en activo en la privada, recuerda al residente de Urología de primer año llamado Ibrahim, sus comienzos de «buen profesional» y «buena persona», y cómo con el paso de los años «ese médico prometedor» se dedicó a la gestión «nombrado por méritos políticos», y se convirtió, «como no podía ser de otra manera, en político, dejando de lado los valores de los profesionales sanitarios, y poniéndose al servicio de la administración, al precio que fuese necesario».
Asimismo, también relata en su carta que las veces que acudió como jefe del Servicio a indicarle las necesidades que requería el mismo no recibió respuesta y que antes de su jubilación le envió una misiva de despedida, donde le hacía un recordatorio de lo que había hecho al frente del Servicio de Cirugía General y lo que quedaba por hacer. El cirujano albacetense le recuerda al gerente del CHUA que el Hospital de Albacete está totalmente colapsado, que los profesionales han sufrido muchas situaciones críticas y las han superado con trabajo, esfuerzo y dignidad, invitándole si le queda «sensatez» a dimitir.