Enrique Belda

LOS POLÍTICOS SOMOS NOSOTROS

Enrique Belda


Interpretar Madrid sin estridencias

11/05/2021

Un político debe estar a la vanguardia de todas las tendencias y en cabeza de cualesquiera olas, surfeándolas. Pero si se transforma en analista parece coherente que lo haga desde la retaguardia y la lejanía. En estos días tenemos la necesidad de casar en beneficio de un correcto diagnóstico dos hechos incuestionables. El primero es la lectura en clave nacional de los resultados del Partido Popular en Madrid. La segunda, es de hacerlos solo extrapolables a aquellos sitios que se comportan como Madrid.
Conjugar ambas cosas significa que el asco que ha generado el presidente Sánchez con su chulesca gestión, es una realidad, pero el alcance de ello es relativo según el lugar y las circunstancias en las que se encuentran los votantes. Así, la tendencia al alza del PP es previsible, si no cambia el modo de gobernar de los socialistas y sus satélites, en lugares que compartan las referencias sociológicas de Madrid: Valencia, Alicante, Málaga, Valladolid, Zaragoza, Murcia, Santander, las capitales insulares, el triángulo más poblado de Asturias, el corredor de La Sagra o el Henares, o las pequeñas capitales de provincia. No parece tan probable una subida espectacular, aunque sí apreciable, en Cataluña, País Vasco, Baleares, y la España de los pueblos medianos de Andalucía, Extremadura, Castilla-La Mancha, Aragón y el levante interior, que tienen un acreditado comportamiento autónomo y fidelizado en el recuerdo de voto.
Por ello, si el Partido Popular quiere ganar las elecciones generales, debería no encasillarse en el patrón de la operación reactiva de Madrid, y aplicarla solo donde pueda germinar, sin abandonar una profunda renovación es sitios como Cataluña y País Vasco, donde sigue siendo imprescindible postergar unas siglas quemadas y buscar la convergencia de todos los perfiles constitucionalistas.
Las elites madrileñas del PSOE y PP han tendido históricamente a magnificar la influencia de la capital, que es mucha y palpable en las comunidades que la rodean, pero se va difuminando hasta perderse a medida que se llega a la periferia, y tal actitud ha contribuido a una dispersión de objetivos comunes basados en la integración pactada y la descentralización, ya inevitable.
Por lo demás, el asunto que más me ha gustado de los resultados de Madrid y que confirma lo que venimos repitiendo, es que el crecimiento del Partido Popular es por el centro, y por el voto pendular que en ocasiones va al PSOE o se abstiene. Que VOX siga su curso, que ya veremos sus resultados cuando el PSOE deje de focalizar sus recursos mediáticos en esa formación.