A José Manuel López Carrizo, secretario general del PSOE de Tarancón, la vida le cambió radicalmente desde que decidió ser alcalde. Se levanta temprano y se acuesta tarde, confiesa estar volcado en agilizar proyectos para ayudar a sus vecinos y  solucionar problemas desde la cercanía. Gobierna desde hace dos años con mayoría absoluta en una ciudad centenaria que no deja de crecer. 

¿Cómo le ha cambiado la vida ser alcalde desde hace seis años?

Aunque en mi caso ya era una persona muy conocida, pasas a ser aún más conocido, te cambia por la responsabilidad diaria que asumes, los problemas y las soluciones, evidentemente los más desfavorecidos son los familiares más cercanos y los amigos, pero es verdad que también te da muchas satisfacciones. 

Cuando tienes pasión por ayudar a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y ves alguna muestra de que lo has conseguido es una satisfacción que es difícil de describir.  

¿Es como se lo habían contado?

Los días que pasas con esa angustia porque no salen las cosas como uno quiere, que has puesto todo de tu parte pero ya la responsabilidad no es tuya, sientes mucha impotencia, pero como es más la pasión, al día siguiente vuelves con energías renovadas, ánimo renovado y viendo otra vez todo de color de rosa, que es como quieres que sea para tu pueblo.

¿Cuál es su balance de estos dos años de su segundo mandato?

Poco malo puede pasar ya. Desde la pandemia dichosa que ha afectado a todo el mundo, la famosa Filomena que dejó graves consecuencias materiales, las inundaciones y muchas otras cosas... En fin, el ánimo se va limando cuando hay un mal día, pero debemos tener una pila eléctrica que lo recarga por la noche. 

Nos ha dado tiempo a atender necesidades prioritarias y además preparar toda una batería de proyectos en los que estamos muy ilusionados y convencidos de ejecutar en los próximos meses. A pesar de la lentitud de la administración, en estos dos años no hemos dudado ni un minuto en convocar un pleno, Junta de Gobierno o reunión extraordinaria para que no se retrase ningún proyecto que pueda venir a Tarancón y generar actividad económica.            

¿La normalidad institucional de la que hace gala le está ayudando?

No es lo mismo una oposición que judicializa todo, que una que ayuda en todo, entiende las propuestas del equipo de Gobierno y además en los plenos se ve, muchas cosas se sacan por unanimidad, es verdad que en ese sentido avanzamos de forma consensuada y por sentido común.

¿Su principal logro y el peor lastre?

Sin lugar a dudas lograr el equilibrio presupuestario es la gestión de la que estoy más satisfecho hasta el momento, aunque tengo mi talón de Aquiles, no poder llevar a cabo los proyectos que tenemos de forma más rápida, pero se llevarán. 

¿Cuál es la previsión para los próximos dos años de esta legislatura?

Cuando tengamos los proyectos redactados y las memorias, pues iremos licitando, adjudicando y ejecutando por plazos, según se pueda, dando prioridad al casco antiguo. 

Queremos tener un pleno extraordinario, antes del ordinario del día 24, para no perder ningún día, con el fin de elevar al Pleno el remanente de tesorería -que alcanza los 6 millones de euros- para poder ejecutar todos los proyectos que tenemos. Adecentar el polígono Senda de los Pastores con 1,2 millones de euros, el plan de asfaltado, la urbanización integral del cementerio, la obra en el auditorio, la reconstrucción del Arco de la Malena o el quiosco en la plaza de la Constitución. 

Una de sus frases es, «Tarancón una ciudad para vivir, una ciudad para invertir». ¿Ya se está trabajando en un nuevo Plan de Ordenación?

La redacción y elaboración del proyecto del POM (Plan de Ordenación Municipal), 200.000 euros, está incluida en el remanente de tesorería. Hay que esperar a que los técnicos definan la hoja de ruta, pero sobre todo queremos que sea una herramienta certera, de donde estamos, lo que queremos y hacia donde vamos. Un plan de futuro, pero partiendo desde la realidad, un plan de ciudad moderna, accesible, sostenible, abogando por un crecimiento que no sea fugaz, sino consolidado. 

Tarancón es el municipio que más crece de Cuenca, ¿cómo lo valora?

Sí, un signo importante es que prácticamente el total de viviendas que había se ha absorbido todo en los últimos cuatro años, y ya hay varias propuestas y proyectos en el Ayuntamiento para comenzar a crear vivienda nueva, algo que hace mucho tiempo que no pasaba, es una muestra más de que el padrón sigue creciendo de forma coordinada, como así me gusta que sea. 

¿Cómo está viviendo la conmemoración del centenario de la ciudad?

Entre este año y el primer trimestre de 2022 van a salir adelante obras que quedarán para la historia del centenario. Estoy muy satisfecho, el rey ha aceptado la Presidencia de Honor. Los actos previstos son un buen motivo para que la gente vaya recuperando la normalidad. Por primera vez coincidiendo con el centenario hemos entrado en la gira Platea del Ministerio de Cultura, un salto cualitativo y cuantitativo en la programación cultural, que para las fiestas ya estamos preparando. 

¿Cómo serán las fiestas?

Muy seguras, desde el punto de vista sanitario, especialmente locales, invitando a todos los vecinos de la zona por supuesto. Creo que estamos haciendo una buena selección de conciertos. Actos multitudinarios, sin que el control sanitario del Ayuntamiento pueda hacerse al cien por cien no se programarán. 

¿Se volverá a presentar como alcalde en las próximas elecciones?

Hoy en día tengo la ilusión y las ganas de trabajar por Tarancón intacta, incluso aumentada. Los dos primeros años fueron muy duros, en lo personal, por el desgaste mental que uno lleva, pero me encuentro fuerte, me siento querido, también criticado, como pasa a todos los alcaldes, en estos dos años intentaré convencer a los detractores. Pero sin lugar a dudas tengo intención de volver a presentarme, si así lo estima mi agrupación y mi partido, de ser el candidato, a excepción de que ocurra alguna cosa  personal o política... Si llegada la hora veo que lo conveniente es que haya cambio, que nadie tenga duda que no me voy a aferrar al sillón, haré siempre lo que mejor le convenga a los intereses de los taranconeros y de Tarancón.