Francisco Benito, Galán y Miguel Moura salen a hombros en el festejo de rejones

R.L.C.
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Los rejoneadores de Tarancón triunfaron junto al joven portugués hijo de Joao Moura y ante casi tres cuartos de público en el tendido en la lidia de reses de distintos hierros de la conocida ganadería Capea, de Pedro Gutiérrez

Sergio Galán logró cuatro orejas y un rabo, mientras que los otros dos rejoneadores dos trofeos cada uno. - Foto: R.L.C.

La plaza de toros portátil de Tarancón, instalada en la avenida de Adolfo Suárez, registró este viernes casi tres cuartos de público en el tendido durante el festejo de rejones, que contó con los taranconeros Francisco Benito y Sergio Galán, y el portugués, Miguel Moura, que sustituyó a su hermano lesionado hace unos días en una corrida.

Con toros de diferentes hierros de la ganadería Capea, de Pedro Gutiérrez, que estuvo presente en el callejón, se repartieron un total de nueve trofeos en una tarde taurina que acabó con la salida a hombres para los tres rejoneadores.

El gran triunfador fue Sergio Galán, con dos orejas y dos orejas y rabo. Francisco Benito logró dos orejas y aplausos, mientras que el hijo de Joao Moura una oreja en cada uno de sus toros.

La plaza de toros portátil, instalada en la avenida de Adolfo Suárez, reunió  principalmente a aficionados y peñistas que disfrutaron de la corrida de toros durante casi tres horas.La plaza de toros portátil, instalada en la avenida de Adolfo Suárez, reunió principalmente a aficionados y peñistas que disfrutaron de la corrida de toros durante casi tres horas. - Foto: R.L.C. Reses de entre 520 y 485 kilos que permitieron a los toreros a caballo lucir su cuadra en el centro del coso, arriesgando junto a las tablas y divirtiendo con giros, quiebros, e incluso banderillas al violín. El público, peñistas y aficionados taurinos, se volcó con los rejoneadores locales, pero también con el portugués. La vistosidad de los caballos, que recibieron continuas muestras de cariño por parte de los jinetes, propició en numerosas ocasiones los aplausos de los presentes, niños, jóvenes y adultos.

Junto a la seriedad del evento,  la nota de humor la pusieron las mulillas, que no tuvieron fácil llevarse a los toros en alguna ocasión, o el momento en que el propio Miguel Moura, subido a su caballo, animó junto al público a que el presidente, el teniente alcalde de la localidad, Juan Alfaro, le concediera su primera oreja.

Durante los distintos paseíllos, los asistentes valoraron la faena del rejoneador portugués, especialmente por su juventud, y demostraron su aprecio por los toreros locales, los rejoneadores Sergio Galán  y Francisco Benito, pero también se alegraron de ver en las cuadrillas a Valentín Ruiz y Pedro Benito, respectivamente. La Corte de Honor, con traje de corto los caballeros y de flamencas las chicas, lanzó claveles a los toreros, y las peñas blusones y pañuelos.

La corrida se prolongó durante casi tres horas, provocando que al no haber iluminación el momento final de la Puerta Grande, seguido por numerosos vecinos desde el exterior, quedará deslucido.

La programación taurina de las Fiestas y Feria Nuestra Señora de Riánsares 2014 acaba este sábado, a las seis de la tarde, con la suelta de reses con concurso en el juego Gran Prix.