Gonzalo García Huerta, optometrista de Clínica Baviera Burgos acaba de regresar de Meki (Etiopía). La expedición solidaria ha sido muy provechosa ya que, en siete días de intenso trabajo, ha podido atender junto a varios compañeros a más de 350 pacientes de la mano de la ONG Stop Ceguera, con la que colabora desde hace tres años, y con la que han acudido al complejo socio-sanitario que la Fundación Pablo Horstman tiene en esa región (compuesto por un orfanato, una guardería y una clínica materno-infantil).

García Huerta tiene el Grado en Óptica y Optometría por la Universidad de Valladolid y una experiencia laboral de más de 20 años. Desde hacía tiempo tenía la inquietud de realizar labores de voluntariado, tanto es así que en 2018 realizó un Curso en Cuidados Oculares y Visuales en Países en Vías de Desarrollo en la Universidad de Valencia. Ese mismo año conoció la labor que hacía Stop Ceguera gracias a uno de los oftalmólogos de Clínica Baviera que habitualmente viaja con esta ONG que, desde su fundación en 1997, ha logrado devolver la vista a más de 4.000 personas de África y América.