La que fuera portavoz de Ciudadanos en Castilla-La Mancha, Orlena de Miguel, se ha ofrecido a «dar la cara» y un paso al frente si así se lo pidiera la militancia, tras el descalabro electoral del partido en las últimas generales.  

Cabe recordar  que De Miguel optó hace ahora un año a liderar la formación naranja en la región, aunque finalmente se retiró de la batalla a favor de su actual número 1, Carmen Picazo, porque desde el aparato le pidieron «amablemente» que se apartase. «Lo hice porque creía que era lo mejor y no quería perjudicar al partido ni al proyecto. Pero creo en el proyecto, y Cs es un partido liberal, de centro y que propone cosas útiles por encima de siglas», ha dicho De Miguel en una entrevista en CMM.

En este sentido, la exportavoz naranja ha insistido en que cuando se trabaja por un proyecto hay que estar «en las duras y en las maduras» y, ahora mismo, «vienen duras». «En un momento de crisis hay que dar la cara y creo que quiero dar la cara si lo quieren los militantes la daré por ellos».

Unas palabras que parece que no han sentado del todo bien al actual equipo regional de Ciudadanos. En este sentido, el diputado autonómico y secretario de Programas y Áreas Sectoriales de la formación, David Muñoz Zapata, ha dicho que el «talento» de personas como De Miguel es «bienvenido», siempre que no venga con «exigencias».

«Los críticos y las críticas siempre son positivas, porque te hacen mejorar», ha asegurado, pero «no creo que sea el momento para venir ahora a decir ‘esto ya lo dije yo’ o ‘¿qué hay de lo mío?’», ha concluido.