El PP, a nivel nacional, ya ha movido ficha. Génova lo tiene claro y apuesta por una renovación territorial del partido a lo largo y ancho del país. Según una información publicada esta semana por El Mundo, más de una veintena de provincias están llamadas al cambio y entre ellas se encuentra Cuenca. El objetivo de la cúpula es, por un lado, impulsar los nuevos liderazgos surgidos tras las elecciones autonómicas y municipales, y por otro, reforzar las estructuras provinciales en torno a la figura de Pablo Casado. En ese proceso, según apunta también este diario, será clave el papel que desempeñe el máximo responsable a nivel regional, Francisco Núñez, ya que será el encargado de apadrinar los relevos.

La sensación predominante más allá de lo que se piensa en la capital es que Génova ha decidido mover el árbol y que los frutos, siguiendo el principio más básico de la teoría newtoniana, irán cayendo. En este sentido, fuentes regionales consultadas por La Tribuna respetan y valoran la decisión del mando nacional, y creen que es una «toma de impulso» para los nuevos retos que están por llegar. Sostienen además que aunque a Núñez se le otorguen galones en la sucesión, serán los afiliados quienes decidan el futuro del partido, y es que «esto va más allá de una decisión de la dirección nacional o de la regional».

En cuanto a los plazos –importante–, no descartan incluso llevarlo a cabo antes de que termine este año. En cualquier caso, será antes de la primavera de 2021. En Albacete y Ciudad Real, sin ir más lejos, el proceso ya ha echado a andar. Con todo, en Toledo no obvian la «singularidad» del caso de Cuenca...

Con este paso al frente «tan directo y claro» a nivel nacional, las bases del partido en territorio conquense entienden que se ha terminado de abrir la caja de Pandora. Si es que todavía seguía cerrada… En este sentido, la «piedra angular» para la regional sigue teniendo el mismo nombre y el mismo apellido: Beatriz Jiménez. Diferentes fuentes del seno de los populares en Cuenca mantienen que la actual diputada nacional es «pieza clave» en el proceso de renovación del Partido Popular conquense. Por eso, «no hay duda» de que la «primera opción» impulsada por parte de región sería ella. Pero, en este momento, «no es fácil». Estas fuentes coinciden en que Jiménez no solo no ansía la dirección provincial, sino que además «no va a pelear por ello». Su camino profesional y, sobre todo, personal tiene otro recorrido. La Tribuna ya ha contado en alguna ocasión que, en este sentido, «la tendrían que convencer o animar» y, la verdad, «no parece sencillo».

Las quinielas. En este callejón sin salida las quinielas se abren, pero el abanico de ‘posibles’ es «muy reducido». Estas fuentes consideran que existen tres opciones posibles. La primera es que el foco se dirija hacia personas que actualmente ocupen cargos de representación a nivel municipal, provincial o regional. Ahí creen que la baraja de nombres es «muy básica» porque no hay apenas cargos y, por línea general, son perfiles que «no tienen iniciativa propia ni representan el sentir del partido en Cuenca». Es más, dicen, «no tienen un discurso propio emanado desde la base». Por eso, responden con un «no» a la pregunta que ellos mismos se hacen: «¿Van a generar expectativa o ilusión?». Argumentan que Cuenca necesita ahora mismo gente «combativa» para que «si un día hay que decirle a región esto o lo contrario, se le diga sin problemas». Lo que no se necesita, terminan en esta línea, «es un funcionario en una ventanilla».

La segunda opción es mirar hacia personas sin representación en este momento, pero que sí la han tenido y han sido «importantes» en anteriores etapas políticas. Señalan en este punto a los ecos conquenses del gobierno de Cospedal o del Ayuntamiento entre 2007 y 2011. Por tanto, no se descarta –recalcan estas mismas fuentes– ese tipo de perfil «respetado en el partido, que pueda servir como nexo de unión, que conozca el funcionamiento interno y que además sea aglutinador». En este apartado las posibilidades, comentan, se reducen a «tres o cuatro nombres».

La tercera opción, aunque entienden que la más «remota», es que haya una vía alternativa en forma de «militantes de base que decidan dar el paso si tienen apoyos», con independencia de que anteriormente hayan ocupado o no puestos de responsabilidad. En este sentido, hay un nombre que emerge con más fuerza que ningún otro, y es el de Montserrat Martínez. Según ha podido saber La Tribuna, la que fuera senadora tiene «toda la intención» de presentarse como candidata a las primarias. Además, «está convencida de ello», confirman fuentes del PP. La exsenadora, añaden, «se siente apoyada y va a dar el paso». Aunque eso sí, rematan, «ha avisado de que nunca va a ser un obstáculo para la regeneración del partido».

Actual dirección. Para el final hemos dejado una de las hojas más importantes de la margarita. La llave que descerroja todas las puertas es saber si el actual presidente provincial del partido, Benjamín Prieto, va a presentar batalla en esta carrera. Porque eso, entienden estas mismas fuentes, «borraría de un plumazo muchas de las quinielas posibles». En este sentido, fuentes de la cúpula provincial aseguran a La Tribuna que siempre han contemplado que el congreso se va a celebrar «el año que corresponde», 2021, o como pronto a finales del actual «por muchos intentos y rumores interesados que haya sobre su adelanto desde hace meses».

Aseguran que Prieto está «tranquilo» y que tiene la intención de «agotar plazos» para desvelar públicamente sus intenciones. «Solo está centrado en trabajar por nuestra provincia», insisten con vehemencia. Estas mismas fuentes aseguran que la decisión de Prieto de ser reelegido como presidente «no estará condicionada porque haya otras candidaturas alternativas a la suya». Defienden a capa y espada que la fuerza radica en las bases y, en este punto, dicen, «Prieto sigue contando con respaldo y reconocimiento por ser un trabajador incansable y un gran conocedor de la provincia».

Estas fuentes de la cúpula provincial argumentan que el presidente «es consciente de que hay quien está empeñado en intentar convencer a alcaldes, concejales y afiliados de que no puede seguir al frente del Partido Popular de Cuenca». Eso está provocando, añaden, «que estos alcaldes, concejales y afiliados estén cerrando filas en torno a él», conscientes de que su trabajo es «fundamental» para «mantener y añadir gobiernos municipales» y «recuperar el voto» que se perdió en las elecciones autonómicas y en las generales. Hoy por hoy, sentencian convencidos, «Prieto es el único que puede presentar batalla al PSOE y es un eslabón clave para volver a alcaldías e instituciones».