El Ejecutivo de Castilla-La Mancha, a través de la Dirección General de Salud Pública, confirmó ayer que el número de hospitalizados en cama convencional por COVID-19 asciende a 111, aunque no facilitó ya cifras de nuevos contagios en función de la estrategia esbozada por el Gobierno Central en esta nueva fase de gestión de la pandemia.

Por provincias, Cuenca sólo tiene dos pacientes ingresados en cama convencional por esta enfermedad, mientras que Toledo tiene 36  de estos pacientes, Ciudad Real 29, Albacete 25 y Guadalajara 19. Los pacientes ingresados en las Unidades de Cuidados Intensivos que necesitan respirador son 10, de los cuales ninguno de ellos permanece en la UCI del complejo hospitalario de Cuenca.

Asimismo, desde el pasado viernes se registrado cuatro nuevos fallecimientos por COVID-19 en Castilla-La Mancha, uno de los cuales se registraba en Cuenca, otro en Guadalajara y dos en la provincia de Ciudad Real. 

El número acumulado de fallecidos desde el inicio de la pandemia son 6.939, de los cuales un total de 641 se contabilizan en Cuenca, concretamente 67 muertes se han  producido en lo que llevamos de años.

Un total de 48 centros sociosanitarios de Castilla-La Mancha tienen casos confirmados de positivo por coronavirus entre los residentes, de los cuales cinco se sitúan en la provincia conquense. Los casos confirmados entre los residentes son 731. Los fallecimientos acumulados de residentes de estos centros desde el inicio de la pandemia son 2.305.