La obra del pintor Cristóbal García Salmerón llega a la Racal

Redacción
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La historiadora Sonia Casal Valencia ofrece este martes la conferencia 'Santos, apóstoles y penitentes. La obra pictórica de Cristóbal García Salmerón'

La obra de pintor Cristóbal García Salmerón llega a la Racal

Nacido en Cuenca en torno al año 1603, tanto la obra como, especialmente, la figura del pintor Cristóbal García Salmerón ha sido, pese a su calidad y la aceptación que su quehacer tuvo en su época, bien poco y no siempre bien conocida no ya a nivel nacional sino entre sus propios paisanos a pesar de que quizá pudiera ser considerado uno de los mejores pintores barrocos con obra en la propia Catedral conquense con trabajos como su Apostolado de la Sala Capitular, la serie de los Profetas, el Retablo de San Juan Bautista o La Coronación de Espinas. A remediar en muy buen grado ese desconocimiento y con ello a, de paso, corregir algunas de las afirmaciones que sobre su trayectoria se habían venido dando durante largo tiempo por los pocos estudiosos que se habían acercado a su biografía, llegaba en los últimos tiempos la tesis doctoral de la historiadora Sonia Casal Valencia, la conferenciante que este martes, bajo el título de Santos, apóstoles y penitentes. La obra pictórica de Cristóbal García Salmerón – va a intervenir en los Martes de la RACAL para hablar precisamente de este pintor. Será a partir de las ocho de la tarde en el salón de actos de la corporación académica en la segunda planta del edificio de las antiguas Escuelas de San Antón con, como es habitual, entrada libre y gratuita.

A partir de los numerosos documentos encontrados por su labor investigadora, Sonia Casal ha conseguido ampliar considerablemente el conocimiento en torno a la figura de García Salmerón y aumentar su catálogo pictórico al mismo tiempo que, como indicábamos, ha cuestionado datos que le habían sido asignados autor tras autor hasta esbozar un mucho más preciso panorama de sus circunstancias biográficas y de su papel en la sociedad conquense de su momento histórico, estableciendo, por ejemplo, que si bien sería cierto que hubo de formarse con algún maestro pintor en las dos primeras décadas del siglo XVII, no se puede afirmar, cual se había venido señalando, que ese aprendizaje estuviese directamente vinculado con el murciano Pedro Orrente a pesar de la coincidencia de algunas características de su obra con las de la de este artista. Sonia Casal considera que más bien su aprendizaje estaría más en relación con alguno de los pintores en ese momento existentes en Cuenca, pintores que fue descubriendo a lo largo de su investigación. Serán sin duda datos que, junto al repaso de las obras de García Salmerón existentes en nuestra capital, estarán presentes en la conferencia en la Racal de la historiadora.

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