El pintor conquense Pedro Romero Sequí expone hasta el jueves una colección de obra reciente en el ámbito cultural de El Corte Inglés de Alicante, una treintena de composiciones donde  predominan los paisajes y rincones urbanos de ambas ciudades, en una especie de hermanamiento artístico promovido por la Asociación Amigos de las Casas Colgadas de la capital levantina.

El artista plástico, de 58 años, compagina la actividad profesional en el sector inmobiliario con su pasión por la pintura, donde se formó de manera autodidacta, tal y como comenta a La Tribuna. «Durante la crisis de 2008 me centré de lleno en la pintura, al tener más tiempo libre, y desde entonces no la he dejado, siempre dispuesto a mostrar mi obra allí donde me invitan, de hecho en este tiempo he expuesto bastante en Cuenca, la muestra más reciente fue en el Edificio Iberia, y también he colgado mis cuadros en el Ateneo, la Cámara de Comercio y  el Archivo de Indias de la capital sevillana, de hecho en primavera tengo pensado exponer de nuevo allí, en La  Hermandad del Gran Poder».

Sequí confiesa que es un artista disciplinado y dedica todos los días unas horas a la pintura en su estudio de la calle Carretería, porque él no pinta del natural, sino que parte de fotografías o reproducciones, y en cuanto a su estilo se define como «un pintor figurativo, con un toque de informalidad en sus cuadros».

Temáticamente su producción está centrada en paisajes y vistas urbanas, pinturas de edificios y construcciones emblemáticas, retratos, motivos históricos y  grupos humanos. «No me gusta encasillarme en unos motivos concretos -aclara-, procuro que en mis exposiciones se incluyan una amplia muestra de motivos para que resulten amenas al espectador».

Dice darle especial importancia al colorido y la luz, pero también pinta en blanco y negro, incluso realiza dibujos con bolígrafo, y en cuanto a técnica generalmente se decanta por el acrílico sobre lienzo e incluso sobre cartón.

En la muestra que nos ocupa De Alicante a Cuenca y viceversea, donde recibió un obsequio de manos del presidente de Amigos de las Casas Colgadas, Antonio Buendía, reúne reproducciones variadas, motivos tanto de aquella provincia como de ésta, pueden verse la Catedral de Cuenca, las Casas Colgadas, obras alusivas a la Semana Santa fechas... mientras que de Alicante pueden verse vistas de la playa del Postiguet, la explanada, el edificio de la Casa Carbonell y localidades como Alcoy.

Tras reconocer la influencia ejercida en él por muy diversas corrientes artísticas -cita como referencias a dos genios situados en polos opuestos, Diego Velázquez y Antonio Saura-, adelanta su intención de centrarse en los pinceles una vez finalice su vida laboral,  porque la pintura, afición heredada de su padre, supone para él toda una forma de expresión.