En el horizonte ya se dibuja el hito con el que sueña cualquier niño que quiere ser torero. El que fuera alumno de la Escuela Taurina de Cuenca, Marcos, tomará la alternativa el próximo día 19, en el coliseo romano de Nimes. José María Manzanares será su padrino de doctorado, mientras que Juan Leal hará lo propio como testigo de la ceremonia. Los toros escogidos para tan señalado día lucirán el hierro de Garcigrande y Domingo Hernández, la ganadería propiedad de la familia materna del toricantano.

A escasos días de realizar el paseíllo «más importante» de su vida, Marcos se muestra «tremendamente ilusionado», y es que no puede ser de otra manera al verse anunciando en Nimes y en un cartel así. Ahora bien, la alternativa responsabiliza, «y mucho», y por eso es muy lógico que desde que se propuso dar este paso «el runrún no haya parado». Aunque está muy seguro de sí mismo, la profesión va por dentro, y es que «a la gente que está en mi entorno no le transmito dudas ni preocupaciones, pero está claro que es una alternativa, en un año muy atípico y no habiendo toreado por las circunstancias».

Lo que no ha faltado ni falta es preparación física y mental en el campo. De hecho, ésta ha sido mucho «más extensa» de lo normal, aunque no haya tenido «la misma intensidad» que la que puede tener una novillada en una plaza de toros. Con todo, desde que el compromiso ya es firme, «la mentalidad te cambia por completo y te transformas como persona». Entonces, añade, «no miras ni el camino recorrido ni lo que está por llegar, solo piensas en el día ‘D’ y en la hora ‘H’... Todo lo demás, no importa».

Se trata de reducirlo todo a la máxima de carpe diem, y es que el momento invita a ello. «¿Qué puedo decir del cartel?», se pregunta Marcos. «Manzanares es una primerísima figura del toreo y Juan Leal es un torero con enorme proyección. Además el escenario del coliseo es impresionante y la feria la organiza Simón Casas, que es uno de los mejores empresarios taurinos en este momento», argumenta. Con todo, el ingrediente más importante de este guiso es la ganadería seleccionada. No podía ser otra. «Desde niño soñé que los toros de mi alternativa tenían que ser de la ganadería de mi abuelo».

Dicho esto, habrá que estar pendientes de la evolución de la pandemia. A nadie escapa que son muchos los festejos que se han anunciado y que debido a los rebrotes, poco tiempo después, se han suspendido. «Ese miedo siempre está ahí y a veces le das vueltas aunque no quieras», reconoce Marcos, aunque está «tranquilo» porque la alternativa es en el país vecino, menos proclive a suspender. Con todo, «la mentalidad no cambia».