Nervios a flor de piel

Manu Reina
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Carlos López y Daniel García confían en superar la prueba de acceso a la universidad, que arranca hoy y finaliza el viernes para los 892 alumnos de la provincia que se examinarán

Los alumnos Carlos López (izquierda) y Daniel García preparan con ilusión, ganas y nervios los exámenes de la prueba de acceso a la universidad. - Foto: Reyes Martínez

Los nervios, a flor de piel. No es para menos teniendo en cuenta que durante los próximos tres días (8, 9 y 10 de junio) se juegan su futuro académico. Y es que cientos de estudiantes comienzan hoy en Cuenca la Evaluación para el Acceso a la Universidad (EVAU) e intentarán dar su mejor versión en cada uno de los exámenes que tendrán que completar tanto en horario de mañana como de tarde. El objetivo es obtener la máxima calificación posible y superar la nota de corte que les permita cursar la titulación de sus sueños. Este es el reto que tienen por delante tanto Carlos López como Daniel García, al igual que los otros 890 alumnos conquenses que se presentan este año en la convocatoria ordinaria de junio.

Estos dos jóvenes, amigos inseperables desde la infancia, llevan tres semanas y media de intensa preparación. No han tenido apenas descanso durante este tiempo y confían en alcanzar el objetivo marcado para así disfrutar después de un plácido verano. Una época que esperan con los brazos abiertos tras un año académico muy exigente. Han compartido horas y horas de estudio, risas y nervios, pero también han resuelto dudas y problemas juntos y han puesto en práctica un guión de estudio muy parecido donde no han levantado ni la cabeza ni los codos del escritorio durante casi un mes. Tras un arduo y constante trabajo, la suerte está echada. «Hemos estudiado mucho y confiamos en obtener la mejor nota posible y estudiar lo que más nos apasiona», señala López.

Los dos acabaron de forma satisfactoria el bachillerato en el IES Alfonso VIII y, sin tiempo que perder, se pusieron manos a la obra para recopilar la máxima información posible en las materias de Lengua y Literatura, Historia, Inglés y Matemáticas. En estas cuatro asignaturas, tipificadas como obligatorias o troncales, tendrán que examinarse. Pero también han estudiado de forma voluntaria otras dos más, consideradas como optativas, con tal de subir la calificación media y tener así más opciones de cursar las carreras de sus sueños. De esta forma, Carlos López, que quiere ser médico, se examinará también de química y biología, mientras que Daniel García lo hará con física y dibujo técnico, sin dejar de pensar que su meta es llegar a ser matemático o físico. «He estudiado muchas horas durante todo los días para prepararme los seis exámenes que tengo por delante», explica García. El mismo guión ha seguido López, que reconoce sentir nervios ante las pruebas que tiene por delante, con especial énfasis en historia y lengua «porque son las más complicadas al tener más información que memorizar». 

La calificación en la fase obligatoria corresponde al 40 por ciento de la nota total para poder acceder a los estudios superiores y las calificaciones obtenidas en Bachillerato suponen el 60 por ciento restante. Según la ponderación, se tomarían las dos asignaturas de la fase voluntaria con mejor calificación para elaborar la media y con las que se podría llegar, como máximo, a una nota de 14. Daniel García cuenta con 9,25 de calificación media en Bachillerato, mientras que Carlos López suma un 7,3. Ambos, que completarán los exámenes de estos días en la Facultad de Enfermería del campus universitario conquense, no dudan en que alcanzarán sus objetivos. Especialmente López, que es además flamante campeón de España en piragüismo. Un título que le reconoce como deportista de alto rendimiento y eso le permite optar a unas plazas reservadas específicamente para estos héroes que combinan el deporte de élite con los estudios. Los dos confían en pasar la prueba. Al igual que el resto de los estudiantes, ya que existe un elevadísimo porcentaje de aprobados. Atrás quedarán los nervios y el sufrimiento, que se contagia muchas veces a familiares y amigos, y continuarán sus formaciones en diferentes instituciones académicas. En el caso de estos dos jóvenes, sus pretensiones son cursar las titulaciones de sus sueños en la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM). 

Eso sí, para más inri, los alumnos seguirán en tensión también durante el fin de semana, ya que las calificaciones no se publicarán hasta el lunes y martes de la próxima semana. Sin duda, la suerte está echada y ojalá sea muy repartida.