Ilia Galán

LA OTRA MIRADA

Ilia Galán

Poeta y filósofo


Ejemplares cenas navideñas

25/12/2022

La alegría se dibujaba en los rostros mientras las sonrisas probaban las copas de cava con desenfadadas conversaciones, antes de entrar a los hermosos salones, entre tapices y cuidados adornos, donde íbamos a disfrutar la tradicional cena. Después de la pandemia, el embajador del Reino Unido, Hugh Elliott, volvía a estar con nosotros, los dos clubs siempre competidores, rivales en su búsqueda de la excelencia: la Oxford University Society Madrid y la de Cambridge. El representante de esta alzó el brindis por la universidad rival, Oxford, y viceversa. 
La cena comenzó con amplia y tradicional bendición en latín… Per Christum Dominum nostrum, a la que los comensales respondieron asintiendo, romanizados: amen. Rivales pero unidos, en una situación política y económica que no es fácil para nadie. Elliott en muy poco tiempo ha visto pasar tres primeros ministros... Tampoco en nuestro país la situación es fácil y la radicalización de unos y otros no parece beneficiarnos, aunque tal vez de la navidad podamos aprender algo.
Común es encontrarse en cenas alegres en estas fiestas que celebran el nacimiento del Mesías, el gran cumpleaños de Jesús de Nazaret, que ha configurado nuestra civilización con este modelo de humildad, paciencia y bondad amorosa; también de perdón. Las familias se reencuentran y se intenta pasar por encima de las diferencias, de los disgustos, de rencillas o discusiones. 
El mundo político está polarizado en extremos que la mayor parte de la población apenas entendemos, pues se trata de sacar la nave común adelante y para ello es necesario llegar a algunos acuerdos, aunque no sean perfectos. Que los más altos tribunales estén peleándose no ayuda al prestigio de nuestras instituciones, que deberían ser neutrales, si la justicia es justa, con un velo sobre la cara para no torcer la balanza... Dejar de mirarse las heridas, las ofensas, los males y buscar darse la mano, transmitirse paz, es esencial si queremos habitar la misma sociedad y que sea hogar. Tenemos mucho en común, pese a las hondas diferencias, y en la calle no queremos guerras civiles sino encontrarnos para salir, juntos, adelante. Si el problema catalán se puede de algún modo arreglar, el procedimiento que se emplee no es tan importante como el objetivo, poder convivir en paz y con libertad, si es posible juntos y donde podamos desarrollarnos cada cual con su modo particular de ver la realidad.
El bebé del Belén muestra al Rey de los universos convertido en una criatura frágil, diminuta... El Infinito unido a lo finito y limitado, como un modelo, pero pacífico, tierno. Desarrollar la ternura con quienes tenemos al lado puede ser magnífica tarea navideña.
 El final de la cena, con la chispa del buen vino, con el vientre agradecido, nos encontró de nuevo, pensando que podemos hacer muchas cosas juntos, ayudándonos unos a otros.