El sistema de Dependencia de Castilla-La Mancha cerró el año 2021 con un «récord» en prestaciones para la Dependencia, con un total de 80.243, lo que supone un incremento del 70% con respecto al año 2015, cuando había 47.160. Además, son más de 23.300 los empleos directos registrados a cierre del pasado ejercicio, 13.500 más que cuando el Ejecutivo de García-Page llegó al Gobierno, un 14,1% más. Unos datos que para la consejera de Bienestar Social de la Junta, Bárbara García Torijiano, «ponen de manifiesto la reconstrucción, reactivación y consolidación del sistema desde el año 2015». Pero también fruto del impulso que se ha hecho tras la crisis sanitaria de la Covid-19, como una apuesta clara del Ejecutivo por este ámbito.

García hizo este jueves balance del sistema de Dependencia en Castilla-La Mancha en el que también destacó los datos de reducción en las listas de espera, bajándolas en un 39%. Muy por encima del 14% que lo hizo la media del país, y por encima también del 25% comprometido en el Plan de Choque firmado con el Ministerio. Además se han disminuido los tiempos de atención pasando de 248 días en diciembre de 2020 a 214 días en diciembre de 2021, y se ha reducido el llamado «limbo de la Dependencia», que son aquellos que teniendo reconocida la dependencia, están pendientes de recibir la asistencia o prestación, . Un logro conseguido «gracias al esfuerzo y al gran trabajo de los profesionales de esta casa y de todas las delegaciones», reconoció la consejera.

En cuanto a los beneficiarios de asistencia, García destacó que en diciembre del año pasado hubo 63.814 personas atendidas, lo que supone un crecimiento de 34.688 con respecto a julio de 2015, un 84% más.

Los más demandados. García subrayó también la labor de servicios muy valorados por la ciudadanía como la ayuda a domicilio, que ha crecido un 126% con más de 9.000 ayudas más que en 2015, hasta llegar a las 16.215; o la teleasistencia, con 13.838 más que en 2015, llegando a las 18.710, un 284% más.

«Castilla-La Mancha ha avanzado 39 puntos en el Grado de Cobertura de la Dependencia, desde 2015», situándose, según el Imserso, con el 95,5 por ciento de personas que están siendo atendidas. Un dato muy importante a nivel nacional porque sitúa a Castilla-La Mancha como la segunda comunidad autónoma en grado de cobertura de todo el país», aseguró la consejera.